Vive la Pasión de Cristo
“El que no ama no ha conocido a Dios y Dios es amor”
“Los Jóvenes han perdido el rumbo, se olvidan de Dios y dan paso a la desolación, depresión y adicciones”, así lo lamentó Javier Estrada, quien el día de hoy, cargará a cuestas una cruz de más de 50 kilogramos, él, vivirá en carne propia la travesía que realizó Jesucristo antes de ser sacrificado, por lo que desde hace poco más de dos meses se ha preparado tanto espiritual como físicamente. El joven de 33 años de edad, pertenece a la iglesia El Dulce Nombre de Jesús, donde desde hace un par de años es integrante del grupo de adoración perpetua, cuyo objetivo es la oración constante ante el Santísimo Sacramento del altar.
No cabe duda, que representar la Pasión de Cristo es una de las más tortuosas representaciones a la que un cuerpo puede exponerse, pero es un gran honor para quien lo realiza, así lo describió Javier Estrada, quien manifestó sentirse honrado de personificar a Jesús, y que hoy durante el recorrido del Viacrucis viviente en la iglesia de Santa Ana estará ofreciendo su fatiga por el bienestar y armonía del pueblo Campechano. En el relato al periódico
La i, dijo que él recibió la invitación por la constancia en el grupo de oración, que sin lugar a dudas confía en que es el motivo principal que lo impulsará a soportar el cansado recorrido, donde tendrá que aguantar los inclementes rayos del sol, los azotes y hasta caminar descalzo por el asfalto, para ello, insistió en que ha tenido una intensa preparación espiritual, basada en eucaristía, ayuno y penitencia. En cuanto a la preparación física se ha alimentado sanamente, ha estado durmiendo bien y también ha salido a caminar para tener condición.
Javier, hizo un llamado a los jóvenes a tener un encuentro con Dios, a tomar en serio la vida, dejar a un lado las cosas banales que los alejan mucho más de la presencia de Cristo, y dicho alejamiento siempre ha sido el causante de varios crímenes, pues al sentirse vacíos, sin amor caen en adicciones y aún peor deciden arrebatarse la vida; pues recalcó, que según la primera carta del apóstol San Juan dice: “el que no ama no ha conocido a Dios y Dios es amor”.