Alejandro: “Sólo pienso en volver y conseguir un trabajo mejor”

Merecen una oportunidad

En el mes de los niños, te traemos parte de la historia de Alejandro, quien a sus 15 años de edad cambió las comodidades, el juego y la escuela por las calles de Campeche, para proveer junto a su papá el sustento de su madre y sus cinco hermanos. Es triste saber que como Alejandro, cientos de niños no recibirán este 30 de abril un juguete por hacer actividades que sólo le competen a los adultos.

¿Qué haces en las calles de Campeche?

“Soy de Chiapas, a penas tengo un mes que llegué con mi papá y trabajo boleando zapatos”.

¿Por qué trabajar a los 15 años?

“Porque sí, lo quise así, ya no seguí estudiando, sólo llegué a la primaria. Es que mi mamá no me dejó estudiar, no le agradaba que fuera a la escuela, pero no sé porqué”.

¿Qué tal te ha ido como bolero?

“Campeche está bien bonito, me ha ido bien en la chamba, hago de $120 a $180. Mi papá me enseñó el trabajo y ya sé bolear todo tipo de zapatos, tardo como unos cinco minutos. Diariamente salgo de donde vivo a las ocho y regresamos a las seis. El trabajo lo hacemos andando, caminando en el parquecito y en otros lados”.

¿Cuál es tu meta en la vida?

“Nada, no tengo metas en la vida, no lo había pensado antes. Mi idea más adelante es regresar a Chiapas y conseguir un trabajo mejor. Es bonito acá, pero me siento mejor en donde nací”.

Si pudieras pedir algo ¿qué pedirías?

“Un refresco porque tengo sed. El dinero sólo lo debo guardar bien, no debo gastarlo”, terminó.