¡Olvido! Casa del Estudiante
Sin mejoras efectivas
Apropósito del día del estudiante, fecha que se celebró el pasado miércoles 23 de mayo; decidimos realizar una visita por el albergue estudiantil La Casa Del Estudiante Campechano Pedro Sáinz de Baranda, ubicado en la calle Licenciado Verdad del barrio San Román, Campeche; donde constatamos las condiciones en las que 45 jóvenes de diferentes latitudes del Estado habitan con el único propósito de superarse. El amor por los estudios y el sueño de apoyar a la familia económicamente a corto plazo, es el carburante que impulsa a los moradores del referido albergue. En entrevista con el coordinador actual, Eldier Isaías Cowt Ku, declaró que el hecho de vivir en la casa es un apoyo que evita el pago de rentas, pero la atención por parte de las instancias encargadas no es la más efectiva. “Mensualmente recibimos un apoyo por 10 mil pesos donde pagamos agua, electricidad y comida. Antes cada uno recibía una despensa, pero ahora sólo nos dan unas cuantas”, declaró. De acuerdo con Cowt Ku, el apoyo económico que ha recibido la Casa del Estudiante ha sido el mismo durante años, por lo que la compra de comida se realiza gracias a “la cooperacha”.
“No nos da el apoyo que recibimos porque tenemos que comprar la comida para la semana, pagar el gas y pagarle a la cocinera, por eso cada uno de los que aquí vivimos aportamos $120 semanales para que comamos”, indicó. Durante el recorrido externo e interno, nos causó conmoción las condiciones inadecuadas del lugar. Si bien Eldier reveló que en diciembre remodelaron las fachadas y ciertas áreas, recalcó que tal acción derivó de las gestiones del anterior coordinador estudiantil, un año después. Aunado a lo anterior, tanto Eldier como los estudiantes precisaron que el calor es insoportable, debido a que los ventiladores de techo están en desuso desde hace varios años. Asimismo, los cuartos están decolorados, sin puertas y con ventanas rotas.
En total son dos los baños del albergue estudiantil, uno en la planta baja con tres bacines y cinco regaderas sin divisiones, donde la puerta de acceso es a penas cerrada por objetos que se colocan detrás; al cual sólo una persona puede usar; y otro en la planta alta en tétrico estado. Finalmente, los aplicados estudiantes hicieron un llamado al gobierno del Estado, asociaciones civiles e instancias pertinentes para mejorar y proveer las necesidades que hoy requieren, como Internet, mejor alimentación y seguridad, ya que en reiteradas ocasiones han sido víctima de los “amigos de lo ajeno”.