La ciudad fantasma
Que esta ciudad –con nombre en honor al río Támesis– se encuentre totalmente despoblada, resulta curioso en un país superpoblado como es China. Thames Town es una parte nueva dentro del distrito de Songjian, a unos 30 kilómetros del centro de Shanghai. Este distrito es una zona suburbana, milenaria, que se considera la cuna de la cultura regional.
Songjiang y el centro de Shanghai están unidos con una línea de metro, la 9.
La ciudad de aires británicos, ocupa cuatro kilómetros cuadrados y originalmente el propósito de su diseño y construcción fue darle alojamiento a la población de la ciudad universitaria de Sonjiang y mudar gente del centro de Shanghái.
Thames Town se pensó para que lo habitasen 10 mil personas. Con estructura de un típico barrio familiar británico con pocos comercios, los suficientes como para abastecer a la gente.
Las casas y pisos se vendieron muy rápido a precios caros, pero en su gran mayoría se vendieron como “segundas casas”, así que la consecuencia inmediata fue la subida de los precios y que en realidad nadie vivera allí, así se convirtió en un pueblo fantasma.
El complejo fue parte de la iniciativa “One City, Nine Towns”, encargada por la Comisión por la Planificación de Shanghái en 2001.
La parte “One City” del programa fue de temática inglesa: Thames Town. Mientras, la parte “Nine Towns” fue situada en los otros suburbios de Shanghái, cada uno con su temática europea: Escandinavia, Italia, España, Canadá, Países Bajos y Alemania.
Basado en la arquitectura clásica de los pueblos ingleses –con calles adoquinadas, terrazas victorianas y tiendas de esquina–, gran parte de los edificios se han copiado de los que se encuentran en Inglaterra, incluyendo la iglesia (siguiendo el modelo del templo de Cristo en Clifton Down, Bristol), un típico pub y una tienda de Fish and Chips (copiado de edificios en Lyme Regis, Dorset).