Influenza
La influenza es una enfermedad infecciosa, aguda y contagiosa, causada por un virus, que ataca las vías respiratorias y produce fiebre, dolor de cabeza y una sensación de malestar general. La influenza puede afectar a personas de cualquier edad.
¿Qué causa la influenza?
Frecuentemente la causan los virus tipo A (H1N1 y H3N2) y tipo B.
Síntomas de la influenza
Se caracteriza por el inicio súbito (no gradual) de fiebre alta, tos, dolores musculares, articulares, de cabeza y garganta, intenso malestar y abundante secreción nasal.
Contagio
Las personas infectadas pueden contagiarla a través de gotitas que se expulsan al toser, estornudar o hablar.
Momentos de contagio
Los adultos pueden contagiar desde 1 día antes de que los síntomas se desarrollen, hasta luego de 24 horas de desaparecida la fiebre sin medicamentos para ello. Aunque el periodo puede extenderse sobre todo en niños.
¿La influenza siempre es grave?
9 de cada 10 personas que adquieren influenza presentan síntomas leves. 1 de cada 10 puede presentar una infección respiratoria aguda grave y puede requerir hospitalización. En algunos casos la enfermedad se complica y causa la muerte.
Personas con mayor riesgo de sufrir un caso grave
La posibilidad de desarrollar una infección respiratoria aguda grave es mayor en grupos poblacionales como embarazadas, personas mayores de 65 años, niños menores de 5 años y pacientes con enfermedades crónicas (diabetes, asma, inmunodeficiencias, obesidad, entre otras).
Medidas si aparecen síntomas
Si los síntomas aparecen, debe buscar atención médica de inmediato.
Medidas de prevención
-Vacunación para grupos vulnerables (embarazadas; niños menores de 5 años a partir de los seis meses de edad; mayores de 65 años; personas con enfermedades crónicas; personal sanitario), en los centros de salud.
-Guardar reposo y evitar el contacto con otras personas en caso de tener la enfermedad, hasta 24 horas después de que haya desaparecido la fiebre sin necesidad de ningún medicamento; toser sobre un pañuelo desechable o sobre el ángulo interior del codo; lavarse las manos constantemente.