Cleptomania
Causas, sintomas y tratamiento
La cleptomanía es un trastorno del control de impulsos cuya característica principal es un intenso impulso de robar objetos innecesarios, casi siempre de poco valor. Es una enfermedad mental poco frecuente, que a menudo se acompaña con otros desequilibrios emocionales.
El cleptómano no planifica sus robos ni busca beneficiarse de los mismos. Esa necesidad imperiosa de adueñarse de lo ajeno surge de la emoción intensa que le causa el acto en sí. Sin embargo, posteriormente, puede experimentar una sensación de vergüenza o culpa. Aunque de momento no hay una cura para la cleptomanía, el tratamiento con medicamentos y la terapia psicológica puede ayudar a disminuir el ciclo de robo compulsivo. Por desgracia, muchos se niegan a buscar apoyo, pues no aceptan su problema o temen ser juzgados.
Características:
En primer lugar, el cleptómano no roba para beneficio personal, sino que siente un impulso tan fuerte que no se puede resistir.
Por otro lado, casi siempre actúa de manera espontánea, es decir, sin planificación o colaboración de otra persona. La mayor parte de las veces los robos ocurren en lugares públicos, como tiendas o supermercados; sin embargo, muchos llegan a robar en casas de amigos o conocidos.
Es habitual que el individuo esconda los elementos robados y no les dé uso alguno; sin embargo, en ocasiones prefiere donarlos, regalarlos o, inclusive, devolverlos secretamente al lugar donde fueron robados. Los impulsos van y vienen, y se pueden producir con mayor o menor intensidad con el paso del tiempo.
Causas:
Se desconoce cuál es la causa exacta de la cleptomanía. Una de las teorías sugiere que ciertos cambios en la actividad del cerebro pueden ser los responsables. También se piensa que la emoción del robo ayuda a reducir los síntomas depresivos del cleptómano.
Muchos casos se asocian a trastornos de adicciones, pues el robo aumenta la liberación de dopamina, neurotransmisor que produce placer. El individuo, buscando de nuevo esa sensación gratificante, repite los robos una y otra vez. Otro posible detonante son las alteraciones en el sistema opioide del cerebro, encargado de regular los impulsos. El problema es más frecuente cuando hay antecedentes familiares de cleptomanía o si se tiene otra enfermedad mental como trastorno bipolar o ansiedad.
Síntomas:
Además del impulso incontrolable de robar, los pacientes con cleptomanía experimentan otros síntomas psicológicos. A continuación repasamos los principales:
—Fuerte impulso de robar cosas innecesarias —Sensación de tensión, ansiedad o excitación antes del robo
—Placer o sensación de alivio durante el robo —Culpa, remordimiento o vergüenza después del robo
—Temor de ser arrestados después del robo —Reaparición de los impulsos y repetición del ciclo de cleptomanía
Tratamiento:
La cleptomanía es muy difícil de superar sin un tratamiento. Por eso, aunque haya sentimientos de humillación y temor de por medio, es primordial que la persona afectada solicite ayuda profesional. De lo contrario, la conducta será prolongada, con tendencia a empeorar. El tratamiento para controlar este problema incluye medicamentos y psicoterapia. No obstante, no existe un tratamiento estándar y aún no se sabe con precisión qué puede funcionar mejor. Por lo general se recomiendan varios tipos de tratamientos hasta notar una mejoría. El continuo apoyo profesional y familiar es clave para afrontar este problema.