Her mosos
Manteles bordados para los muertitos
Marcelina Uc Chí, por más de un década es la encargada de bordar los paños de muerto con el que se recubren las osamentas, de quienes en vida alegraron con su presencia, y hoy, yacen en el descanso eterno en el recuerdo de los que aún permanecemos en la tierra. Los paños, son cambiados año con año, y Doña Marcelina asegura que el significado enigmático hace referencia a la vestimenta que uno normalmente utiliza al ir a una fiesta, y para los muertos; convencida, explicó que así es: “La celebración de los fieles difuntos, es eso, una fiesta para los que ya se adelantaron en el camino y por eso, cada año, hay que cambiarles el traje, el paño, engalana y cobija los restos de las personas que ya fallecieron”.
Desde hace más de un mes, Marcelina se prepara para que con su manos, le de vida a los paños. Pese a su edad y el cansancio de los años, no flaquea y convencida se dedica a darle color a los mantos que recubrir a los restos.
Dijo que para ella es tarea fácil, pues la experiencia y los años le han otorgado la agilidad para que con paciencia lleve a cabo los acabados y después los pinte con delicadeza. Ella, es muy conocida en el poblado de Pomuch, Hecelchakán, que es ahí donde la historia a sembrado raíces, la cultura y tradición; ya que Pomuch ha trascendido por la limpieza de huesos y que ha ella, dicha actividad le ha servido de ingreso económico, pues tan sólo en la comunidad, para limpieza de osamentas, en tan solo un día llega a vender entre 150 a 200 paños, cuyos precios oscila entre los 40 y 80 pesos, según sea el tamaño y acabado de la pintura y el estilo. Convencida de lo que su trabajo representa mencionó que de la capital y otros municipios acuden a ella para que les dibuje y decore el mantel que utilizarán en el altar de fieles difuntos, el mero día del “Hanal Pixán”, que adorna el tradicional Pibipollos. Marcelina Uc Chí manifestó que cada año espera con ilusión el mes de noviembre, para que con su talento sea participe de unas de las prácticas culturales más importantes del Estado a nivel internacional, donde los muertos, en alma, hacen acto de presencia para generarles a los vivos posibilidad de empleo.