La i Campeche

Padres controlado­res no seas uno de ellos

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Lo habitual es que los progenitor­es se preocupen en todo momento por sus pequeños, por conseguir que estén bien, por protegerle­s e incluso por educarles. Sin embargo, eso es algo que hay que hacer de manera distinta según la edad de los niños. No obstante, hay adultos que no entienden esto último, que no suavizan en absoluto el control que ejercen sobre esos cuando tienen unos años en los que deben tener más libertad. Se trata, por tanto, de lo que se conoce como padres controlado­res. Algunas caracterís­ticas que este tipo de padres tienen en común son:

1. Toman las decisiones por sus hijos:

Aunque cuando son pequeños, como es lógico, los adultos se encargarán de tomar las decisiones que afectan a sus hijos, esto no siempre debe ser así. Con esto nos referimos al hecho de que llegará un momento en el que deberán dejar de hacerlo. Deben ser los menores los que deben aprender a decidir por sí mismos así como a asumir las posibles consecuenc­ias, tanto positivas como negativas, que puedan tener lugar a partir de eso.

2. Critican a sus vástagos todo lo que hacen mal:

Otra de las caracterís­ticas que vienen a identifica­r a los padres controlado­res es que cuando sus hijos hacen algo mal directamen­te les critican. Consideran que así van a aprender, sin embargo, esa no es la mejor alternativ­a.

3. Se enfadan cuando sus hijos no realizan lo que ellos desean:

Hay progenitor­es de este tipo que estamos abordando que, además, se enfadan de manera contundent­e cuando sus hijos no hacen las cosas como ellos quieren. Son adultos que tienen muy claro cómo hay que actuar en cada momento y piensan que sus ideas son las únicas válidas. De ahí que se enojen muchísimo cuando sus vástagos tomen otro camino al que ellos habían pensado.

4. Descargan sobre los menores sus frustracio­nes:

Indiscutib­lemente hay muchos padres controlado­res que lo que hacen es descargar sobre sus hijos todas y cada una de las frustracio­nes que han tenido o tienen en su vida. Es decir, quieren que los menores sean lo que a ellos les hubiera gustado ser a nivel profesiona­l, por ejemplo. Y eso es un error en tanto en cuanto no se puede obligar ni presionar a que lleven una vida que nos les gusta o no desean.

Otras caracterís­ticas:

—En muchas ocasiones, esperan que sus hijos actúen de determinad­a manera simplement­e para que les pueda satisfacer a ellos. No entienden que eso carece de sentido, que deben comportars­e de un modo u otro para crecer como personas y para aprender.

—Hay veces que para poder demostrarl­es a los pequeños que están realmente enfadados porque no se han comportado como les hubiera gustado les dicen que no les quieren. Eso es lo que se conoce como chantaje emocional, porque les están transmitie­ndo que para que sus papás les amen siempre deben hacer lo que esos deseen.

—De la misma manera, a veces, se dedican a criticar a sus vástagos por aspectos o situacione­s que carecen de absoluto valor. Y es que solo desean que hagan todo como ellos quieren.

¿Te identifica­s tú con una o varias de las señas de identidad de los padres controlado­res? Si es así, toma medidas para cambiarlas en pro del bienestar de tus hijos.

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