Prevención
De los vellos encarnados
Los vellos encarnados son aquellos que se rasuran o se quitan con pinzas, pero que luego vuelven a crecer por debajo de la piel. Cuando esto ocurre, generalmente hay inflamación y dolor. También aparecen pequeños bultos en el lugar en donde se retiró el vello. Este problema puede afectar a cualquier persona que se depile. No importa si emplea una afeitadora, pinzas o cera. Aunque los vellos encarnados usualmente no entrañan ningún riesgo de consideración, sí causan grandes molestias a los afectados.
Los vellos encarnados son más frecuentes entre los hombres afroamericanos que se rasuran la barba. Sin embargo, nadie está exento de este problema. Pueden aparecer en la cara, el cuero cabelludo, las axilas, la zona púbica y las piernas. El factor que más influye para que aparezcan los vellos encarnados es la estructura del vello mismo y la dirección en la que crece. Hay folículos pilosos curvados, que dan origen a vellos muy rizados.
Esto facilita que el vello vuelva a entrar en la piel, después de cortarlo. Cuando comienza a crecer de nuevo, lo hace hacia dentro de la piel. Algunos de estos vellos quedan con un borde muy afilado después de afeitarlos.
Esto sucede particularmente cuando están secos al momento de cortarlos.