Conflicto
Mientras en Campeche el gobernador Carlos Miguel Aysa González celebraba su informe del quinto año de la administración estatal, en Calkiní, aproximadamente 300 elementos municipales, estatales, ministeriales y de la Guardia Nacional llegaron para liberar la carretera estatal Tankuché–Calkiní que se encontraba bloqueada desde hace una semana.
Y aunque el presidente municipal de Calkiní, Roque Sánchez, indicó que todo el operativo se había realizado en completa calma, se dijo que dos mujeres resultaron con lesiones, entre ellas una embarazada, por un enfrentamiento entre los elementos de seguridad y los habitantes.
A su llegada a la zona del conflicto, los agentes instalaron dos barricadas, mientras otro contingente acudió a la Isla, donde procedió con el retiro de la malla que bloqueaba el acceso a la playa.
Luego de tres horas el convoy regresó de la playa con las piezas de la malla y otros objetos que bloqueaban el acceso, ahí el director de la Policía Estatal atendió a una de las mujeres agredidas, comprometiéndose a atenderla en la Secretaría de Seguridad Pública para iniciar con el procedimiento en contra del elemento que solo cumplía órdenes.
El alcalde de Calkiní, indicó que había platicado con los pobladores de ambas comunidades y que el problema no tiene que ver con pescadores ni permisionarios, es por un grupo.
Por su parte el comisario ejidal de Tankuché, José Rafael Trejo, calificó esta acción del gobierno como un teatro para que el gobernador pudiera anunciar en su informe que ya había solucionado el problema y quedar bien, cuando el conflicto continúa, ya que no se dieron resultados ni se dio la mesa de diálogo que se ha estado solicitando. Por ello responsabilizó al presidente municipal Roque Sánchez y al Gobierno del Estado de los nuevos conflictos que puedan surgir entre las dos comunidades.