Balean por la espalda a exgobernador
Las autoridades indagan el asesinato a balazos de Aristóteles Sandoval Díaz, exgobernador de Jalisco, por un sicario en Puerto Vallarta, destino turístico que desde 2015 se ha convertido en escenario de la violencia.
Sandoval Díaz, del exgobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI), murió ayer en un hospital privado después de que un sujetó lo atacó por la espalda en el baño de un restaurante de Puerto Vallarta, ciudad también conocida por ser el escenario del secuestro de los hijos de “El Chapo” Guzmán en 2016.
Según la información oficial recabada, colaboradores del exmandatario estatal lo trasladaron al hospital después de enfrentar otro tiroteo de un grupo armado afuera del restaurante, en una de las avenidas principales de esta ciudad costera, favorita de turistas internacionales.
El fiscal general de Jalisco, Gerardo Octavio Solís, informó en rueda de prensa que han recolectado evidencia tanto en el restaurante como en dos hoteles de la zona, además de haber realizado cateos en el lugar de los hechos y locales aledaños.
El funcionario recordó que la investigación avanza pese a que los trabajadores del restaurante manipularon la escena del crimen.
El lugar está resguardado por decenas de policías municipales y estatales, así como por miembros de la Guardia Nacional, quienes realizan un operativo en los municipios vecinos para capturar a los responsables.
En los últimos años, Puerto Vallarta ha sido escenario de episodios de inseguridad, entre los que destaca el plagio de los hijos de “El Chapo”, Jesús Alfredo Guzmán Salazar e Iván Archivaldo Guzmán, secuestrados en un restaurante por un grupo de hombres armados en 2016.
En noviembre pasado un comando armado secuestró al empresario inmobiliario Felipe Tomé cuando se dirigía a su domicilio en esa ciudad portuaria y posteriormente apareció muerto en el estado de Nayarit.
Los actos de violencia en la ciudad cobran más relevancia pues, con Cancún y Los Cabos, Puerto Vallarta se considera de los principales destinos turísticos de México, con especial atractivo del turismo internacional.
Sandoval Díaz contaba con un equipo de seguridad de vehículos blindados y 15 guardaespaldas, pero solo dos de ellos estaban con él al momento del atentado.