Cómo apoyar a una persona con TOC
CONVIVIR CON UNA PERSONA CON TRASTORNO OBSESIVO COMPULSIVO PUEDE SER DESAFIANTE, PERO ES POSIBLE
Los trastornos no son fáciles, tanto para quien lo tiene como para las personas que se relacionan con ella. Toma mucha paciencia, pero la mayoría de las veces esta rinde frutos, sobre todo en casos de ansiedad. Últimamente he cambiado constantemente mis creencias, creo que es parte del crecimiento personal, vamos evolucionando constantemente. Y llegué a una conclusión basada en la experiencia, de que el respeto y la tolerancia son clave para una sana convivencia. Te permiten abrir la mente a la posibilidad de que no todos piensan como tú, y comprender eso crea armonía en tus relaciones.
En el caso de las personas con trastorno obsesivo compulsivo (TOC), toma un poco más de esfuerzo, pero sí le puedes apoyar. Empezando por entender en qué consiste esta condición. Los expertos la definen como una afección mental que afecta tus pensamientos y tus rituales, y que llegan a interferir con la vida diaria de quien lo tiene.
> Acompáñale a terapia, pero no le presiones
La terapia psicológica es la mejor forma de tratar cualquier situación relacionada con la mente y las emociones, que sientes que se te va de las manos. Pero, a pesar de ser necesaria, es importante que la persona se sienta lista para ir. Mientras tanto, tú puedes acompañarle y estar ahí presente para brindar ese apoyo moral que tanto hace falta.
> Evita obstaculizar las compulsiones
Imagina que tienes una urgencia por ir al baño y tienes uno justo frente a ti, pero alguien te bloquea el paso, seguro sentirás frustración ¿o no? Lo mismo sucede con una persona con TOC, ya que las compulsiones o los rituales son una necesidad emocional para ellos. De manera que lo mejor que puedes hacer es comprenderle, tener paciencia y tolerancia ante ellas.
> Celebra sus victorias, por pequeñas que sean
El trastorno obsesivo compulsivo es tratable, los síntomas pueden ir disminuyendo con el tiempo, pero es un proceso largo. Por eso es importante celebrar esas pequeñas victorias que se van consiguiendo, esto le motiva a seguirse esforzando y a no perder la esperanza. Porque este tipo de ansiedad es más tormentoso para ella que para quienes le rodean.