Cumple 80 años Ismail Kabaré, autor albanés y eterno candidato al Nobel
ellos el Man Booker International Prize y el Príncipe de Asturias de la Letras 2009. En sus libros describe con un lenguaje cargado de imágenes y a veces trágico el destino de su país, su pasado y su presente.
Sin Kadaré, Albania habría permanecido entre 1945 y 1985 como una región desconocida. Algunas de las pocas informaciones que se conocían del país comunista procedían del escritor. Sin embargo, también es un personaje polémico porque durante mucho tiempo apoyó el régimen del dictador Enver Hoxha, que gobernó la República Popular Socialista de Albania de 1944 hasta 1985. Y ese es uno de los motivos, en opinión de algunos críticos, por los que seguirá siendo el eterno candidato al Nobel.
El autor estudió primero historia y filología en Tirana, antes de inscribirse en el Instituto Gorki de Moscú para cursar letras. El primer gran reconocimiento le llegó con su novela El general del Ejército muerto (1963), que fue llevada al cine años más tarde en Francia con Marcello Mastroianni y Michel Piccoli como protagonistas.
Sus obras han sido traducidas a más de 30 idiomas, una veintena de ellas al español, como El palacio de los sueños o El gran invierno, considerada en Albania al principio como demasiado crítica del régimen. No fue hasta 1990 que Kadaré pidió y obtuvo asilo político en Francia. En la actualidad vive entre Tirana y París. Alberto, el wahabismo es la parte más sanguinaria del integrismo musulmán, los saudiárabes son los culpables de los crímenes cometidos contra la humanidad desde hace 30 años. Ruy Sánchez habló también del wahabismo en México, en Chiapas. Pregunté: “¿Por qué dices que hay musulmanes en Chiapas?” “Pues porque los hay. Vayan y verán”. Ruy Sánchez aclaró al final a propósito de Arabia Saudita: “Este es el país al que ahora visita el presidente Peña Nieto en su avión” –el más caro del mundo. Imposible no agradecer al valiente Alberto Ruy Sánchez (que hace unos días también logró nulificar el estúpido corredor Chapultepec) el poder de su voz y la inteligencia bien informada de su intervención. Fue el quien hizo la noche en la reunión del PEN Club de México, que ahora preside Magali Tercero.