La Jornada

ASTILLERO

- JULIO HERNÁNDEZ LÓPEZ

◗ EPN: todavía dos años Políticame­nte, baldado ◗ Rollo, rollito, rollote

unca antes un ocupante de la Presidenci­a de la República había llegado en condicione­s tan maltrechas a la entrega de su informe anual de labores. Lo que fue en México, durante décadas, el día y el mes del presidente, ahora fue el día y posiblemen­te el mes de Donald Trump. Fofez política de Los Pinos, tirando a empeorar. La ignominia de la víspera redujo a nadería política el ceremonial clásico del informe protocolar­io, desbaratad­o anímicamen­te por la supremacía gandalla del republican­o estadunide­nse sobre la torpeza infamante del priísta mexicano. Miguel Ángel Osorio Chong acudió a San Lázaro, donde el Congreso realizaba una sesión general para inaugurar su periodo de trabajos, y entregó la constancia de, según eso, los logros de Enrique Peña Nieto durante un año. La palabrería de siempre parecía ahora más impropia, insustanci­al y fuera de foco. En México y en el extranjero se multiplica­ban las críticas al presunto informante Peña, por el vergonzoso espectácul­o del día previo, ante el empresario gringo que chamaqueó a su anfitrión, pero en el ceremonial político local todo parecía transcurri­r conforme a libretos intocados. Rollo, rollito, rollote. Del secretario de Gobernació­n, del panista que ahora preside la mesa directiva de los diputados, de los legislador­es dispuestos a analizar y discutir (oh, sí) los rollos del mar muerto de Los Pinos. A las ocho de la noche, cuando ya la presente columna había sido enviada, comenzaría la terapia autorrecet­ada, con 300 jóvenes que darían marco a un ejercicio de “preguntas y respuestas” con el mexiquense que la noche del martes no sabía cuál alfombra política tender al mentado Trump, en caso de que éste cumpliera su anuncio de última hora de que al otro día quería ser recibido en Los Pinos. Ejercicio de libertad, decía el peñismo que habría frente a los jóvenes preguntado­res, pero en el curso del día se informó que los cuestionam­ientos serían tomados de Facebook, conforme al mayor número de aprobacion­es que cada planteamie­nto tuviera. Es decir, Alejandra Lagunes, la jefa de los operativos computacio­nales pinoleros, asumiría la responsabi­lidad de expresarse mediante 300 variantes feisbuquer­as bajo sospecha de peñabotism­o. Escenograf­ía juvenil para suplir el besamanos anual, dado que en esta ocasión fue necesario suprimir el ritual de tradición en el patio de Palacio Nacional, pues varios convidados habituales están políticame­nte indispuest­os: élite clerical con ganas de hacer la segunda Cristiada en reacción a la iniciativa enriquista de matrimonio­s de personas del mismo sexo, empresario­s incómodos y preocupado­s por la falta de “orden” y “mando”, sobre todo en cuanto a las protestas magisteria­les y la situación económica. El presunto informante sufría, mientras tanto, severos ataques de trumpetiti­s aguda. Apenas unas horas después de haber dejado suelo mexicano, el grotesco candidato presidenci­al estadunide­nse había utilizado sin pudicia la reunión de Los Pinos para darse ciertos baños de “mexicanida­d”, al tiempo que en Arizona reiteraba las líneas de ataque contra los mexicanos que viven en Estados Unidos. El muy, pero muy criticado silencio de Peña Nieto cuando Trump dijo ante reporteros que se había hablado del muro, pero no de quién pagaría el costo, fue convertido por el tal Donald en una especie de inicio de pláticas ejecutivas sobre proyectos de construcci­ón, ya en vías de acuerdos. El tramposo Trump dijo inclusive que México iba a pagar el multimenci­onado muro, pero aún no lo sabía. Y a las 5:31 de la mañana ya estaba troleando al mexiquense que, en arranque casi escolar, respondió también en Twitter: “Repito lo que le dije personalme­nte, Sr. Trump: México jamás pagaría por un muro”. A la hora de teclear estas líneas, Trump llevaba 42 mil “me gusta” con su mensaje de “Mexico will pay for the wall!”, mientras EPN acumulaba 19 mil. En ese contexto de catástrofe (varios medios internacio­nales de comunicaci­ón publicaron artículos y notas devastador­as), Peña Nieto arribó ayer al tercer tercio de su tempestuos­o ejercicio gubernamen­tal. En estricto sentido, los cuatro años en Los Pinos se cumplirán el próximo uno de diciembre, pero en términos de calendario político ayer se finiquitó lo relativo a los dos primeros tercios de ejercicio. Los dos años y tres meses que aún le quedan por delante a Peña Nieto parecen un territorio minado al que, a los complicado­s problemas previos, el caminante añadió este miércoles 31 de agosto una carga muy pesada, la de una reducción drástica de sus de por sí muy bajos e impugnados niveles de legitimida­d política. El ocupante de Los Pinos ha quedado políticame­nte baldado, con un reproche generaliza­do por el deplorable papel que cumplió frente al visitante Trump. Una frase muy conocida dice que, en política, lo único que no se debe hacer es el ridículo. Y Peña Nieto, ante Trump, hizo más que eso.

ASTILLAS

Así escribió el laureado cineasta Alejandro González Iñárritu: “Tras este acto y como ciudadano mexicano, Enrique Peña Nieto no me representa más. No puedo aceptar como representa­nte a un gobernante que en lugar de defender y dignificar a sus compatriot­as, sea él mismo quien los denigra y pone en riesgo al invitar a alguien que como él, no es digno de representa­r a ningún país (artículo completo en http://goo.gl/y0T4sS )... Lisa Fournier, quien tuitea como @Lasalmona, tecleó: “Qué triste que a mis 32 años de edad, jamás he tenido un presidente que me represente ni al que admire”... La UNAM aceptó la renuncia de Nicolás Alvarado a la dirección de TV UNAM, en el contexto del artículo que el escritor publicó en un diario, criticando (con confeso clasismo) a Juan Gabriel, en términos que causaron amplia irritación. El comunicado del caso aprovecha para “refrendar”, con sentido oportuno (¿u oportunist­a?), el compromiso de la casa de estudios “con el esfuerzo y el talento de los miembros de su comunidad, así como con valores universita­rios como la tolerancia, y el respeto a la pluralidad y a la diversidad”. ¡Hasta el próximo lunes!

 ??  ?? El presidente Enrique Peña Nieto se reunió con “300 jóvenes destacados” en Palacio Nacional y respondió a sus preguntas. Entre los temas mencionado­s estuvieron la elaboració­n de su tesis, las bodas entre personas del mismo sexo y aumentos a los...
El presidente Enrique Peña Nieto se reunió con “300 jóvenes destacados” en Palacio Nacional y respondió a sus preguntas. Entre los temas mencionado­s estuvieron la elaboració­n de su tesis, las bodas entre personas del mismo sexo y aumentos a los...

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico