La Jornada

Ute Lemper interpreta­rá en Bellas Artes un repertorio que siente en carne propia

■ Estará acompañada por la OSN ■ Los siete pecados capitales, de Weill, y piezas de Kander, Brel y Gershwin, incluso un tango de Piazzolla, integran el programa que repetirá el domingo 4

- FABIOLA PALAPA QUIJAS

Con voz por momentos dulce, en otros poderosa y a veces como murmullo, Ute Lemper (Münster, 1963) tiene el poder de hipnotizar a cualquier mortal y llegar al corazón con su interpreta­ción.

Su cuerpo vibra con la música, hace ligeros movimiento­s con las manos y con su voz crea un espacio de ensoñación. Así es Lemper, la artista que rescata el repertorio alemán de entreguerr­as en sus presentaci­ones.

La cantante y actriz alemana se presenta hoy y el domingo próximo como solista invitada de la Orquesta Sinfónica Nacional (OSN), con la dirección artística de Carlos Miguel Prieto, en la sala principal del Palacio de Bellas Artes.

Desde que escucha las primeros compases de los instrument­os, la diva del cabaret berlinés cierra los ojos, comienza a bailar y juega con el micrófono, mientras su cabello rojizo va de un lado a otro.

Ute Lemper es misteriosa, dulce y apasionada en el escenario. Sus interpreta­ciones confirman su talento musical e histriónic­o, como cuando canta Los siete pecados capitales, del compositor alemán de origen judío Kurt Weill, con textos del dramaturgo Bertolt Brecht.

La obra, como explica Lemper, resume la vida y la creación de Kurt Weill, compositor conocido por un par de obras, entre ellas La ópera de los tres centavos, en tanto la pieza Los siete pecados capitales “es una crítica, una sátira no sólo a Estados Unidos, sino al capitalism­o”.

En esta última, la cantante interpreta a dos Anas; una de ellas es dura, materialis­ta, se aprovecha de los demás y sólo piensa en dinero, mientras la otra Ana no canta, sólo baila.

Para Lemper, la obra de Kurt Weill es vigente y, como señaló en una conferenci­a antes del en- sayo abierto a los medios, la pieza entera Los pecados capitales podría ser una sátira también del candidato estadunide­nse Donald Trump, aunque, precisó, no le consta que tenga el pecado de la gula.

Vasto repertorio

En los conciertos que ofrecerá en el máximo recinto cultural del país junto con la Orquesta Sinfónica Nacional, la diva de Münster interpreta­rá, además de Los siete pecados capitales, una selección de canciones del propio Weill, así como de John Kander, Jacques Brel y George Gershwin, entre otros autores.

Para Lemper, la obra de Weill es parte de su identidad artística, y aunque no se considera la intérprete ideal de este compositor alemán, dice estar consciente de que le tocó vivir ciertas circunstan­cias en los años 80 en Alemania, como parte de la guerra fría, pero también de una ciudad Imágenes del ensayo antes de la presentaci­ón de la cantante y actriz alemana, acompañada por la Sinfónica Nacional, dirigida por Carlos Miguel Prieto como Berlín, donde había un florecimie­nto de teatro e ideas.

Ute Lemper ha señalado en diversas ocasiones que le parece interesant­e interpreta­r el repertorio de entreguerr­as de Kurt Weill, porque es algo que siente en carne propia.

En la aventura de dar voz a algunos fragmentos de Los siete pecados capitales la acompaña también el cuarteto vocal estadunide­nse Hudson Shad, integrado por los cantantes Mark Bleeke, Timothy Leigh Evans, Eric Edlund y Peter Becker.

A las piezas de Weill, que Lemper recupera con fuerza y pasión, le siguen en la segunda parte del programa canciones francesas que trasladan al espectador a las noches parisinas entre sus callejuela­s.

En el concierto, la artista también deleitará al público con el tango Yo soy María de Buenos Aires, de Astor Piazzolla.

Ute Lemper con la Orquesta Sinfónica Nacional se presenta hoy viernes y el 4 de septiembre a las 20 horas en la sala principal del Palacio de Bellas Artes (avenida Juárez y Eje Central Lázaro Cárdenas).

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Foto Yazmín Ortega Cortés

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