AYOTZINAPA, DOLOROSA E INOLVIDABLE AFRENTA
¿Cómo pueden los padres de los normalistas desaparecidos vivir así? Con ese dolor, con la incertidumbre de no saber dónde están sus hijos, con el desprecio y mentiras de los políticos, con el desgaste de dos años de ausencia. Tal vez sea por la esperanza de encontrarlos con vida y la solidaridad del mundo entero. ¿Cómo pueden los políticos responsables seguir así? Con sus mentiras creciendo al paso del tiempo; sosteniendo su “verdad histórica” hecha añicos; sonriendo ante el pueblo; minimizando el abominable hecho condenado mundialmente; prometiendo a los deudos soluciones a dos años de la infamia; protegiendo a los políticos que tuvieron algo que ver en la atrocidad y que se convierte en desprecio a los padres y la justicia misma; esperando que el tiempo ayude a “superar” el dolor, cuando el crimen tiene alcances comparables al 2 de octubre. Nunca se olvidará esta horrorosa afrenta, por más esfuerzos con que la administración en turno lo intente. Nunca. vallas rodeando a estas personas para salvaguardar su seguridad y evitar un enfrentamiento con el FNF, invitándolos a que se desplazaran al “otro lado” del Ángel.
Lo anterior lo corroboró La Jornada en su edición del 25 de septiembre, al informar que no hubo incidentes durante las marchas. grave sería que, sin tener conocimiento, sólo acusara sin precisar, sería crítica infundada.