Suman 36 muertos por las explosiones en Tultepec; 23 personas hospitalizadas
■ Termina la fiscalía mexiquense los análisis genéticos y entrega los restos indentificados ■ Oraciones en la Catedral Metropolitana y agradecimiento por las condolencias del Papa
El fin de semana aumentó a 36 el número de personas que murieron por las explosiones ocurridas el martes 20 en el mercado de juegos pirotécnicos de San Pablito; en tanto 23 aún convalecen de sus lesiones, informaron autoridades del estado de México.
La tarde del sábado se reportó el deceso de Isabel Carpio Lozano, de 39 años de edad, quien se encontraba en el hospital de traumatología y ortopedia de Lomas Verdes, donde era atendida por quemaduras graves.
El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) precisó que Carpio Lozano ingresó el 20 de diciembre con quemaduras en 90 por ciento del cuerpo y falleció por falla cardiovascular, pulmonar, renal y hematológica.
En tanto, el gobierno mexiquense informó que la Fiscalía General de Justicia del estado concluyó las pruebas de ADN efectuadas a cuatro cuerpos, que ya fueron identificados y entregados a sus familiares.
Precisó que personal especializado, con el apoyo de la Comisión Estatal de Atención a Víctimas, explicó a los familiares el proceso realizado.
Indicó que cuatro de los seis fragmentos encontrados en el lugar de la explosión correspondían a uno de los cadáveres recién entregados y los otros dos no pudieron ser identificados.
Puntualizó que 26 de las 36 víctimas murieron en el lugar del estallido y 10 durante su hospitalización. Agregó que también se apoyará a los familiares de estas víctimas para cubrir los gastos funerarios.
Las autoridades mencionaron que en el sitio de la explosión continúa el módulo de atención de la Secretaría de Salud estatal para aclarar dudas a vecinos y familias, y siguen abiertas la línea 01 800 696 96 96 y la página www.edomexinforma.com/tultepec/ para proporcionar información. Unas mil personas, entre ellas artesanos pirotécnicos y vecinos de este municipio, se congregaron este domingo frente al predio que ocupaba el mercado San Pablito, donde el pasado 20 de diciembre ocurrió una serie de explosiones, para lanzar miles de globos blancos en memoria de los 36 muertos.
La tarde de ayer los asistentes vistieron de blanco, y, frente a la puerta principal, resguardada por policías estatales y municipales, rezaron, guardaron un minuto de silencio y se unieron en un abrazo grupal para honrar a sus familiares muertos o heridos.
El nombre de cada uno de los fallecidos fue mencionado. La multitud aplaudió y gritó: ‘‘¡presente!’’ Al pie de la reja colocaron más de 50 veladoras, moños hechos con globos blancos y ramos de alcatraces.
A las 15:25 horas los asistentes soltaron miles de globos blancos y aplaudieron para ‘‘des- pedir’’ a quienes perecieron.
Después del abrazo grupal, gritaron: ‘‘¡Tultepec unido!’’
Mónica Gómez, una de las organizadoras, explicó que a la convocatoria acudieron más de mil personas.
Por la noche, en el foro La Concha Acústica, de este municipio, soltaron más de 100 globos de cantoya para despedir nuevamente a los difuntos.
Obispo elogia a las autoridades
En la misa de Navidad, oficiada ayer en la Catedral Metropolitana por el arzobispo Norberto Rivera, se pidió por la salud de los heridos a causa de la explosión en el mercado de pirotecnia San Pablito y por el descanso de los 36 muertos.
‘‘Por los pobres y los enfermos, por los que se encuentran en los hospitales, en especial por los heridos en Tultepec, para que en esta Navidad sientan de alguna forma la paz y el afecto que Cristo ha traído al mundo’’, se dijo en la peticiones.
También oraron por quienes perecieron en Tultepec, ‘‘para que en el reino eterno contemplen el rostro de Cristo’’.
Asimismo, se pidió por el pueblo de Chile, pues la noche del 24 de diciembre ocurrió un terremoto en la zona sur del país.
Aparte, Guillermo Ortiz Mondragón, obispo de Cuautitlán, agradeció al papa Francisco por su cercanía tras conocer la explosión en Tultepec, y a Franco Coppola, nuncio apostólico en México, así como ‘‘la gran acción organizada por el señor gobernador del estado de México, doctor Eruviel Ávila Villegas, y los municipios vecinos’’. Resaltó el papel de la Secretaría de Salud, la Procuraduría General de la República y la fiscalía estatal por su labor ‘‘ardua, penosa, pero necesaria, en el ágil manejo para reconocer a las víctimas fatales’’.
También reconoció la ‘‘acción inmediata de vecinos’’ para atender a los heridos, al Seminario Diocesano Guadalupano de Cuautitlán y a ‘‘los sacerdotes que, junto con los fieles, están proveyendo de lo inmediato necesario a tantas personas’’.
En su homilía, el cardenal Rivera Carrera recordó a los ‘‘inmigrantes que no son acogidos en sus países de adopción”, “a los trabajadores ocasionales que padecen enormes fatigas para conseguir el sustento diario” y a las “minorías que son víctimas de prejuicios e injusticias’’.
Habló también de las familias que ‘‘soportan cargas diversas que las oprimen’’ y de los jóvenes ‘‘que se sienten perdidos en el mundo de hoy y se les priva de la oportunidad de ganarse la vida y construir una familia’’, así como de los jóvenes que ‘‘pierden el bienestar de su hogar para irse a buscar mejores horizontes en el anonimato y en la incertidumbre de las ciudades o de otros países’’.
Llamó a no limitar estas celebraciones a ‘‘la superficialidad de los adornos, de las comidas, de las fiestas, sino que sea una Navidad verdadera”. CON INFORMACIÓN DE CAROLINA GÓMEZ