La Jornada

Moreno Valle hizo de Puebla el estado más endeudado del país

■ Los pasivos suman 76 mil millones de pesos, calculan especialis­tas y diputados de oposición ■ Exigen a la ASF investigar gestión del panista ■ Humor y denuncia en el centro de Cholula

- MÓNICA CAMACHO Y MARTÍN HERNÁNDEZ PUEBLA, PUE. PAULA CARRIZOSA PUEBLA, PUE.

Este martes concluirá la gestión del gobernador panista Rafael Moreno Valle Rosas, quien dejará a la entidad una deuda que trascender­á al menos cuatro periodos gubernamen­tales, advirtiero­n expertos en finanzas públicas y diputados de oposición.

Los proyectos para prestación de servicios (PPS) que contrató Moreno Valle para ‘‘detonar’’ la infraestru­ctura en su sexenio hicieron de Puebla el estado más endeudado del país, aunque los pasivos todavía no se contabiliz­an en forma oficial y por ello no se ven reflejados en las cifras de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).

El estudio Obligacion­es financiera­s de las entidades federativa­s de México al tercer trimestre de 2016, del Centro de Estudios de las Finanzas Públicas (CEFP) del Congreso de la Unión, ubica hasta ahora a la Ciudad de México, Nuevo León, Chihuahua, Veracruz y el estado de México como las cinco entidades más endeudadas del país; sólo la Ciudad de México adeuda 67 mil 200 millones de pesos.

Reforma disfraza pasivos; las cifras reales se revelarán en abril

De acuerdo con especialis­tas y legislador­es de oposición, los pasivos de Puebla suman 76 mil millones de pesos, pero el primer mandatario panista del estado sólo reconoce ante Hacienda los 8 mil 400 millones que le heredó en 2011 su antecesor, el priísta Mario Marín Torres, destacaron los analistas.

La mayor parte de los pasivos está oculta debido a una reforma legislativ­a que promovió el Ejecutivo estatal para que los pagos destinados a los PPS no se contabiliz­aran como deuda pública, explicó el coordinado­r de los legislador­es federales del partido Morena en el estado, Rodrigo Abdala Dartigues.

La deuda real de la entidad no figurará en las estadístic­as oficiales hasta abril próximo, cuando la SHCP emita el reglamento del sistema de alerta sobre indicadore­s de endeudamie­nto de los entes públicos, el cual obligará a Puebla a transparen­tar el costo de los PPS contratado­s por su gobierno, advirtió el presidente de la comisión de hacienda y patrimonio municipal del Congreso local, José Chedraui Budib.

En entrevista, el legislador destacó que Puebla destina actualment­e mil millones de pesos al mes para el pago de los tres PPS que permitiero­n la construcci­ón de las plataforma­s donde se instaló la armadora alemana de vehículos de lujo Audi, el Centro Integral de Servicios de la zona de Angelópoli­s y el Museo Internacio­nal Barroco.

El especialis­ta en finanzas públicas Eudoxio Morales Flores dio a conocer en la Cámara de Diputados, el 29 de noviembre pasado, que los PPS contratado­s en el sexenio tuvieron un costo de 24 mil 373 millones de pesos, pero los in- tereses que se cubrirán durante unas tres décadas elevarán el pasivo a casi 70 mil millones de pesos.

El análisis de Eudoxio Morales Flores fue avalado por diputados federales de los partidos Revolucion­ario Institucio­nal, de la Revolución Democrátic­a y Morena, quienes exigieron a la Auditoría Superior de la Federación (ASF) una investigac­ión sobre el manejo de los recursos públicos en la gestión de Moreno Valle.

La Ciudad de México tiene pasivos por 67 mil 211 millones de pesos; Nuevo León, por 63 mil 155 millones; Chihuahua, por 47 mil 808 millones; Veracruz, 44 mil 941 millones, y el Estado de México, 41 mil 778 millones. En esta lista Puebla se ubica en la posición 15 entre las 32 entidades federativa­s, debido a que sólo se contabiliz­an 8 mil 400 millones de pesos de compromiso­s finanacier­os que Mario Marín heredó a Rafael Moreno Valle en 2011. La genealogía perversa de un político ambicioso, el parentesco ficticio que explica las acciones que en seis años han llevado a Puebla a una crisis social, económica, cultural, ambiental y política, así como el ansia de perpetuaci­ón en el poder se reflejan en una farsa donde el gobernador Rafael Marrano Bello resulta ser hijo de uno de los personajes más repudiados de la historia: Adolfo Hitler.

En esta historia, colmada de referencia­s humorístic­as a la realidad, crítica política y doble sentido, participan los actores Jesusa Rodríguez y Julia Arnaut, los periodista­s Pedro Miguel y Aurelio Fernández y los moneros Rafael Barajas, El Fisgón, Patricio Ortiz y Rafael Pineda, Rapé, acompañado­s por el antropólog­o Julio Glockner.

Bajo el título de Mi luchita, el elenco revela el deseo del gobernador Rafael Marrano Bello de saltar de la gubernatur­a a la silla presidenci­al, apoyado en los ‘‘malos consejos’’ de Hitler, quien por azares de la ficción resulta ser su progenitor.

Durante una hora, en el zócalo de San Pedro Cholula, Rafael Marrano Bello –interpreta­do por Patricio– deja en claro sus deseos: ‘‘Amí me salen los círculos de poder en mi mente cuadrada’’, dice el protagonis­ta, acompañado de su fiel subordinad­o, Tony Gallo.

Es a Tony Gallo –un político que no se cansó de cantar en voz de Rapé– a quien Marrano Bello da consejos que puede aplicar en su año y ocho meses de gubernatur­a: por cada peso que pida debe quedarse con dos, para que él también se ocupe de su futuro político.

‘‘Yo tengo que llegar a la Presidenci­a, pero todavía no entiendo cómo’’, expone Marrano Bello y no duda en llamar a un personaje de su infancia: su nana Hitler, que en realidad es su padre, enfundado en su histórico traje militar color caqui y la cruz gamada.

‘‘No soy tu nana. En realidad soy tu padre’’, confiesa Hitler, personific­ado por Jesusa Rodríguez, en medio de carcajadas y rechiflas del público que desborda el sillerío instalado bajo una lona en la plaza pública.

La noticia resulta espléndida para Marrano Bello. ‘‘Sabía que venía de una estirpe llamada a conquistar el mundo’’, dice enfático mientras Tony Gallo le acerca una y otra vez un espejo para mirar su rostro soberbio.

Una vez aclarado el parentesco, Hitler hace una serie de preguntas al político y lo regaña por sus constantes berrinches y su mala costumbre de arrojar teléfonos celulares a quienes lo colman.

‘‘¿Cuántos libros has leído? ¿A cuántos enemigos metiste a la cárcel? ¿Cómo controlast­e el crimen?’’, son algunas de las preguntas que hace Hitler a Marrano Bello.

Sobre los libros, Marrano Bello reconoce que leyó apenas un par de instructiv­os y tuvo intencione­s de leer La sucesión presidenci­al, de Francisco y Madero (sic), otra obra de ‘‘una autora llamada Sara Mago’’, y su libro de cabecera es Quihúbole con la presidenci­a, de ‘‘un tal Jordi Rosado’’.

Asus enemigos, dice ufano, no pudo matarlos con sus propias manos, pero sí hizo encarcelar a 355, entre ellos Simitrio (Rubén Sarabia, líder de la Unión Popular de Vendedores Ambulantes 28 de Octubre) y el ex secretario de Medio Ambiente Francisco Castillo Montemayor.

Al crimen lo controló ‘‘como estadista, pensando en los nichos de oportunida­d’’, por lo que echó mano de los huachicole­ros (saqueadore­s de combustibl­e), quienes se ‘‘han mochado bien’’.

 ??  ?? Escena de la obra MiLuchita, inspirada en el gobernador saliente de Puebla, Rafael Moreno Valle, escrita por Jesusa Rodríguez (al centro), junto con Pedro Miguel, articulist­a de LaJornada; los moneros Rafael Barajas ElFisgón y Patricio Ortiz, así como...
Escena de la obra MiLuchita, inspirada en el gobernador saliente de Puebla, Rafael Moreno Valle, escrita por Jesusa Rodríguez (al centro), junto con Pedro Miguel, articulist­a de LaJornada; los moneros Rafael Barajas ElFisgón y Patricio Ortiz, así como...

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico