El clásico del 99, inolvidable; Tuca me dejó en el aeropuerto: Suárez
■ Le tocó participar en más de 10 encuentros Chivas-América con la playera rojiblanca ■ Con Ricardo Peláez, hoy directivo de las Águilas, nos dimos codazos y golpes al por mayor, afirma
jimos al Tuca, que faltabas tú, que esperara, pero dio la orden’. Yo seguía indignado, encerrado en mi enojo, y le advertí: ‘no voy a ir, para qué me abandonó’. Coyote me habló de nuevo tras la cena, le cuestioné si el técnico ya había preguntado por mí, me respondió que no, pero que, desde luego, estaba consciente de mi ausencia.
“Coyote, necio, insistió, ‘ya vente’, y yo igual: ‘No, ¡que se vaya a volar!’ Al rato me volvió a marcar: Ya preguntó por ti... Eran como las 11 de la noche, dijo que me dejara de cosas y finalmente me convenció. Llegué como a la una de la mañana y Alberto me pasó el recado: ‘Que en cuanto llegaras vayas a verlo’.
“‘Tuca ya estoy aquí’, le telefoneé desde el cuarto. ‘Quiero hablar contigo’, respondió. Total, empezamos a discutir, le reclamé, él aseguraba: ‘te fuiste a otro lado’, y yo defendiéndome. Al final me preguntó si estaba bien, le dije ‘sí, y ahí muere’”.
El domingo “jugamos al mediodía, ¡lo bueno que ganamos 1-0! Todos felices y yo era el tema, me hacían bromas... Ricardo nos dio día libre el lunes, pero el martes en el entrenamiento me anunció: ‘Estás multado’. Otra vez empezamos a pelear.
“‘¡Es que tú siempre quieres atender a todo mundo!’, me gritó. Y yo: bueno, pon seguridad para que la gente no se acerque, o dime: tienes tanto tiempo... Finalmente me perdonó”.
El ex zaguero recuerda también los clásicos por el forcejeo con Ricardo Peláez, hoy presidente deportivo del América. “Siempre nos dimos con todo, nos mentábamos la mamá, codazos y golpes al por mayor. Luego nos encontrábamos en la selección y ni nos hablábamos, hasta que comprendimos que era parte del juego. Luego él pasó a Chivas y así empecé otra amistad”, concluye Suárez.