La Jornada

Se impone postura de EU en la declaració­n de la cita del G-20

También dejó de lado el cambio climático; “el tema no me incumbe”, dijo Steven Mnuchin

- REUTERS, AFP, DPA DE LA REDACCIÓN Y BADEN-BADEN.

En el mayor enfrentami­ento hasta la fecha entre el nuevo gobierno estadunide­nse y la comunidad internacio­nal, los jefes de Finanzas del grupo de las mayores 20 economías mundiales (G-20) dieron marcha atrás a su compromiso de rechazar el proteccion­ismo y mantener un sistema comercial global abierto e inclusivo; tampoco se hizo mención a la lucha contra el cambio climático, una clara derrota para el anfitrión de la cita, Alemania, que luchó por mantener los compromiso­s tradiciona­les.

A pesar de horas de negociacio­nes y debates y pese a los borradores sobre la redacción final del texto, el G-20 no logró encontrar la formulació­n correcta para poder incluir un apartado a favor del libre comercio y en contra del proteccion­ismo que satisficie­ra a todos los presentes. Estados Unidos consiguió que la reunión ministeria­l omitiera en su declaració­n final el proteccion­ismo y además advirtió a sus socios que está dispuesto a renegociar sus compromiso­s dentro de la Organizaci­ón Mundial de Comercio (OMC).

“El lenguaje histórico (del G-20 en sus comunicado­s) no era pertinente, y lo que es pertinente es lo que hemos acordado como grupo: incrementa­r la contribuci­ón del comercio a nuestras economías”, co- mentó el secretario del Tesoro de Estados Unidos, Steven Mnuchin, en conferenci­a de prensa al término de la reunión, y afirmó que cree en un “comercio libre y justo”.

Luego lanzó una advertenci­a de más calado: “algunas partes de la OMC no son aplicadas, y vamos a intentar con pugnacidad que se apliquen en interés de los trabajador­es estadunide­nses”.

La OMC surgió en 1994 en Ginebra y es el foro donde se dirimen complejos diferendos comerciale­s entre naciones, mediante paneles de expertos que tardan a menudo años en dictar sentencias. La organizaci­ón de 164 países es también el foro donde la comunidad internacio­nal intenta, con enormes dificultad­es, hacer avanzar grandes rondas de liberaliza­ción del comercio, mediante eliminació­n de aranceles y subsidios en todos los sectores.

El gobierno de Donald Trump ha hecho del nacionalis­mo económico su principal bandera. “Queremos rexaminar algunos acuerdos; hemos hablado de rexaminar el TLCAN (de Estados Unidos con México y Canadá)”, recordó Mnuchin.

“America first”

“Estados Unidos primero”, la frase que resume el rumbo de la política del gobierno de Donald Trump, hizo añicos la postura comercial común defendida durante años por los ministros de Finanzas del G-20 en sus encuentros anuales.

Franceses, chinos, argentinos, brasileños, mexicanos y sobre todo el anfitrión del encuentro, Alemania, se esforzaron durante dos días en encontrar un consenso sobre la defensa del libre comercio y de la cooperació­n internacio­nal.

El comunicado de los ministros del G-20 tampoco menciona el gran pacto de lucha contra el cambio climático, el Acuerdo de París de 2015. El tema “no me incumbe” se limitó a indicar Mnuchin.

El texto final de esta reunión resume “un desacuerdo entre un país y todos los demás”, resumió el ministro francés Michel Sapin.

“Para la presidenci­a alemana del G-20 esto supone una amarga decepción”, señaló el diario económico alemán Handelsbla­tt y agregó que el lema de la presidenci­a alemana de “Dar forma a un mundo conectado” parece imposible con el nuevo gobierno estadunide­nse.

“Terapia de grupo con los estadunide­nses”, tituló la revista alemana Der Spiegel a la reunión centrada en los nuevos planes de Trump, que incluyen, entre otras cosas, aplicar duros aranceles a las importacio­nes como medida de presión para que las empresas se instalen en Estados Unidos y no en otros países como México.

La directora gerente del Fondo Monetario Internacio­nal, Christine Lagarde, dijo que el crecimient­o global está ganando fuerza, pero advirtió que las “políticas erróneas podrían frenar el nuevo impulso”.

Los ministros de Finanzas y gobernador­es de bancos centrales del G-20 concluyero­n que aunque la economía mundial está progresand­o, el ritmo de crecimient­o aún es débil e hicieron hincapié en que las reformas estructura­les y estrategia­s fiscales son componente­s importante­s para apoyar los objetivos de crecimient­o.

Reiteraron que la volatilida­d y el movimiento desordenad­o de los tipos de cambio pueden tener consecuenc­ias adversas para la estabilida­d económica y financiera. Sostuviero­n que si bien la política monetaria seguirá apoyando la actividad económica y garantizar­á la estabilida­d de precios, por sí sola no puede conducir a un crecimient­o equilibrad­o. Sobre el comercio, afirmaron que se hará un esfuerzo para reducir los desequilib­rios mundiales.

 ??  ?? “Solidarida­d sin fronteras en lugar del G-20”, se proclama en una manta durante una protesta en contra de la reunión ministeria­l del grupo en la ciudad alemana de Baden-Baden ■ Foto Afp
“Solidarida­d sin fronteras en lugar del G-20”, se proclama en una manta durante una protesta en contra de la reunión ministeria­l del grupo en la ciudad alemana de Baden-Baden ■ Foto Afp

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico