El olfato humano, tan bueno como el de otros mamíferos, revela estudio
■ Somos más sensibles que los roedores y los perros para algunos aromas y también tenemos la capacidad de seguir rastros de ellos, asegura el neurocientífico John McGann
nían que depender del olfato para sobrevivir y mantenerse vivos como los perros y otros mamíferos.
Pero en realidad, no hay apoyo para la idea de que un bulbo olfatorio más grande aumente el sentido del olfato. “Los perros pueden ser mejores que los humanos en diferenciar el olor de orina y los primeros en saber reconocer el aroma de un buen vino, pero pocas de estas comparaciones tienen apoyo experi-
EN LAS PERSONAS SUSCITA RECUERDOS Y EMOCIONES, Y FORMA PERCEPCIONES”
mental real”, destacó McGann.
Otros hallazgos que apuntaban a diferencias entre el olfato humano y animal procedían de algunos estudios genéticos que descubrieron que ratas y ratones tienen genes para alrededor de mil diferentes tipos de receptores que se activan por olores, comparados con los 400 que tienen los humanos.
Pero esto, según McGann, no significa automáticamente que tengan peor sentido del olfato, ya que también “influye en gran medida en el comportamiento humano, que suscita recuerdos y emociones, y forma percepciones”, subraya.
Según este experto, este sentido tiene un papel importante, a veces inconsciente, en cómo percibimos e interactuamos con otros o seleccionamos pareja. También nos ayuda a decidir qué nos gusta comer. Cuando se trata de manejar experiencias, puede ser un desencadenante en la activación del trastorno por estrés postraumático.
Su pérdida como parte del proceso de envejecimiento también puede ser el comienzo de problemas de memoria y enfermedades como el Alzheimer y el Parkinson. “Espero que el mundo de la investigación médica empiece a valorar la importancia del olfato y a aceptar que perderlo puede volverse un gran problema”, aseguró.