¿LA FIESTA
¿Qué partido es menos taurino?
ra es cuando, aficionados, le han de dar sabor al voto, paráfrasis del popular refrán “ora es cuando, yerbabuena, le has de dar sabor al caldo”, para indicar que ha llegado la oportunidad largamente esperada y debemos aprovecharla. Por ejemplo, el próximo 4 de junio, cuando podremos, ya, empezar a dejar de estar hartos de tanto saqueador inepto. ¿Hace cuántos sexenios, cuántos candidatos se han referido a la tradición taurina como patrimonio cultural inmaterial de México? Ocasionalmente, tres: en 1997, en el Anuario taurino de México, Carlos Castillo Peraza, del PAN, y Alfredo del Mazo González, del PRI, cuando contendieron por la jefatura del Distrito Federal con Cuauhtémoc Cárdenas, del PRD, quien rehuyó el tema taurino. Y en junio de 2000, Andrés Manuel López Obrador, en memorable entrevista para el semanario Proceso, en la cual, con inteligencia, respeto y mesura se refirió a la fiesta de los toros en nuestro país. Posteriormente, algunos gobiernos estatales han blindado a esta función, al declararla patrimonio cultural inmaterial de su entidad, sin más resultados que abstenerse de meter en cintura al empresariado taurino, siquiera en cuanto a la observancia del reglamento se refiere. Hace 34 años el neoliberalismo nos incorporó, por decreto, no por organización y oportunida-