Sin recursos, “de nada sirve” programa para prevenir embarazos adolescentes
Pobreza, violencia, falta de oportunidades, pero también poca información sexual, son indicadores que convergen en el aumento de embarazos en niñas y adolescentes, los cuales siguen sin ser atendidos con políticas públicas, señalaron expertos.
Rosario Texis Zúñiga, coordinadora de la Red por los Derechos Sexuales y Reproductivos en Tlaxcala, dijo en entrevista que si la Estrategia Nacional para la Prevención del Embarazo en Adolescentes no “baja a la realidad que viven, difícilmente va a funcionar”.
Por su parte, Juan Martín Pérez García, director ejecutivo de la Red por los Derechos de la Infancia (Redim), señaló que este mecanismo aunque es bueno “en términos de por dónde hay que hacer acciones”, no tiene recursos, “de nada sirve, es una bonita declaración”.
Indicó que en su mayoría quienes llegan a esta situación son niñas y adolescentes pobres, que tienen dificultades de acceso a escuela, actividades económicas y al desarrollo de un proyecto de vida.
Texis Zúñiga añadió que las políticas sobre seguridad no están siendo asertivas, lo que incrementa los riesgos para las mujeres, en violencia sexual, al no ser consideradas como sujetos de derechos.
La académica e investigadora de la Universidad de Tlaxcala dijo también que el contexto de las niñas y adolescentes actualmente “está muy sexuado” y existe desinformación en su entorno, por lo que se debe “apostar a la educación integral”.
Y lamentó que esto no ocurra desde el nivel básico, pues tampoco “los maestros tocan este tema porque no están capacitados, no se sienten preparados, porque rebasa su realidad y además el Estado no lo garantiza”.
Por su parte, Branda Rodríguez, coordinadora de Comunicación y Campañas del Grupo de Información en Reproducción Elegida (GIRE), indicó que en México cuatro de cada 10 violaciones son a menores de edad, y 60 por ciento de los agresores son familiares.
Cifras publicadas en el portal Niñas No Madres, campaña de esta organización junto con Amnistía Internacional, Planned Parenthood Global y el Consorcio Latinoamericano contra el Aborto Inseguro, señalan que en América Latina una tercera parte de los embarazos corresponden a menores de 18 años y casi 20 por ciento de éstos son en menores de 15 años.
Además, se menciona que el riesgo de morir por causas relacionadas al embarazo y parto “se duplica si las niñas quedan embarazadas antes de los 15 años”.