Falta de coordinación en la Came incide en declarar contingencias: Perla Gómez
La falta de coordinación de las autoridades que forman la Comisión Ambiental de la Megalópolis (Came) para aplicar medidas efectivas en favor de la calidad del aire y la falta de actualización de normas han incidido en las recientes contingencias ambientales en la Ciudad de México, aseguró la presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF), Perla Gómez Gallardo, al presentar la Propuesta general 1/2016 sobre calidad del aire y derechos humanos.
Asimismo, dijo que en estas contingencias ambientales han incidido otros factores, como la falta de aplicación integral del Programa para mejorar la cali- dad del aire en la zona metropolitana 2011-2020, errores en la operación del programa de verificación vehicular y el Hoy no circula, y la falta de información sobre la modificación en los niveles de activación de las contingencias ambientales atmósféricas, ya que en los 25 años recientes se han vuelto más estrictos los niveles con que se decreta la fase de contingencia.
“Haremos entrega de esta propuesta a las autoridades locales, pero también a las federales, porque este tema trastoca ambas competencias en la ciudad. Es necesario que las medidas se coordinen con todas las entidades que forman la megalópolis, para que no sólo se afecte a la Ciudad de México, sino que las medidas se apliquen de forma coordinada en las otras entidades y se den las mismas sanciones o restricciones”, explicó Gómez Gallardo.
La presidenta del organismo enfatizó que mientras las autori- dades locales y federales no se coordinen en este tema, “los que seguiremos pagando somos los habitantes de la Ciudad de México”.
Afecta la competitividad
Por otra parte, el presidente de la Comisión de Medio Ambiente de la Asamblea Legislativa, el pevemista Xavier López Adame, aseguró que los efectos de la mala calidad del aire y del cambio climático implican una pérdida di- recta de competitividad de la ciudad.
“Se estima que si la temperatura global se estabilizara en 2 grados centígrados por arriba de la temperatura preindustrial, la Ciudad de México perdería un porcentaje del producto interno bruto anual de 1.3 a 6.8 por ciento cada año, por el incremento en los precios de los productos agropecuarios, en el consumo de energía y por una mayor incidencia de enfermedades infecciosas.”