Asociación de jubilados, “sin autoridad para reclamar patrimonio” del SME
Acusan al gremio de apropiarse de 16 mil millones de pesos
La Junta Federal de Conciliación y Arbitraje (JFCA) emitió una resolución que establece que los ferrocarrileros jubilados tendrán que seguir pagando cuotas sindicales al comité ejecutivo que encabeza Víctor Flores Morales, no obstante que habían ganado un juicio para dejar de entregar estas aportaciones y que les regresaran 600 millones de pesos.
Según el expediente 25/2010, esa instancia emitió un laudo que señala que Ferrocarriles Nacionales en Liquidación (Ferronales) tiene que seguir aplicando los descuentos a los ex trabajadores, así como canalizarlos a la dirigencia del Sindicato de Trabajadores Ferrocarrileros de la República Mexicana.
“Procedencia de acción no acreditada”
La Junta Especial número cuatro argumentó que la decisión se tomó debido a que “Ferronales sí justificó sus defensas para seguir quitando los recursos por este concepto a los trabajadores, mientras la representación de los jubilados no acreditó la procedencia de su acción”.
De esta forma, absolvió a Ferronales de todas y cada una de las acciones y pretensiones ejercitadas por los ex trabajadores, y señaló la nulidad de cualquier documento que establezca que las cuotas deben ser entregadas a diversas personas. Quienes llamaron a que el Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) se rindiera, abandonaron el gremio y no continuaron en resistencia, “carecen de calidad moral y legitimación jurídica para reclamar la monetarización del patrimonio que tiene esta organización, que es un legado histórico y no se venderá”.
De esta forma el SME respondió a los señalamientos que hizo la Asociación de Jubilados de Luz y Fuerza del Centro (LFC) respecto de que la dirigencia de ese sindicato se ha apropiado del patrimonio de la organización –que calculan en 16 mil millones de pesos– y piden que éste se venda y se reparta entre todos los que laboraron en esa empresa.
El gremio expuso que los miembros de la referida asociación no son integrantes activos del SME, “en años no hicieron vida sindical y menos participaron en la lucha de resistencia que evitó la disolución forzada de esta organización”.
Por tanto, el SME indicó que “no rinde cuentas a los traidores que después del ilegal decreto de extinción de LFC llamaron a la liquidación de los bienes materiales propiedad de la organización, para repartírselos como botín”.
Sostuvo que el SME está legalmente constituido y su dirección fue producto de una elección democrática, está debidamente integrado y tiene facultades legales y estatutarias para administrar los bienes de la organización, los cuales no se venderán “porque el gremio tendrá larga vida”.