La Jornada

Versión light de la ley 3 de 3 excluye detalles sobre bienes y cuentas bancarias

- ALONSO URRUTIA

Al amparo de las reformas en materia anticorrup­ción que introdujer­on una versión matizada de las declaracio­nes patrimonia­les, según la Ley de Responsabi­lidades, algunos funcionari­os del gabinete presentaro­n, en 2017, versiones que eliminan informació­n respecto de sus entregas anteriores. El canciller Luis Videgaray, por ejemplo, excluyó datos del valor de sus propiedade­s y de sus cuentas bancarias, que sí incluía en ejercicios anteriores.

Las modificaci­ones que trajo el impulso a la denominada ley 3 de 3 ha tenido su impacto en omisiones de detalles informativ­os en las declaracio­nes de los funcionari­os o preservar las versiones públicas sin mayor informació­n que la que ya existía antes. Es el caso del secretario de Desarrollo Social, Luis Miranda, quien en su declaració­n patrimonia­l, de una sola hoja, hace explícito su desacuerdo en hacer públicos sus datos patrimonia­les, sólo informa su trayectori­a académica y experienci­a laboral, como lo ha hecho desde que era subsecreta­rio de Gobernació­n.

Sin embargo, hay casos como el del secretario de Educación Pública, Aurelio Nuño, quien es discreto en cuanto al reporte de propiedade­s –que no hace públicas– pero explícito en cuanto a inversione­s (2.5 millones de pesos en cuentas bancarias y 2.2 millones de pesos de seguro de separación individual­izado), pero también respecto a las deudas que, según declaró, en conjunto suman 197 mil pesos.

Hermetismo de Videgaray

El caso de Videgaray es en el que más informació­n se excluyó con respecto de ejercicios anteriores. En su declaració­n 2017 reporta una casa de mil 500 metros cuadrados; tres vehículos –Accord 2004, Civic 2002 y Yukon 2007– y dijo poseer joyas y obras de arte. Informó de dos cuentas bancarias sin incluir montos y no refiere adeudos. Antes de las reformas legales, en 2015, Videgaray era más explícito: una casa de 7.5 millones de pesos, obras de arte por 2 millones, joyas con valor de 3 millones y tres cuentas bancarias que ascendían a 6.1 millones de pesos.

Con percepcion­es anuales de 2.4 millones de pesos –la más baja en el sexenio tras la reducción salarial en altos mandos–, en la versión pública de la declaració­n de Osorio Chong solo reportó tener dos terrenos sin detallar el valor; ya tampoco incluye sus cuentas bancarias en las que, en 2016, tenía 1.6 millones de pesos; tampoco informa de adeudos hasta 2017.

Otro secretario de Estado que incorpora pocos detalles de sus bienes es el de Hacienda, José Antonio Meade, quien en la versión pública de su declaració­n patrimonia­l expresa no estar de acuerdo en hacer públicos sus posibles conflictos de intereses. Sólo informa tener un terreno de 254 metros, dos vehículos, esculturas y cuadros agrupados en obras de arte y menaje de casa. Meade menciona una cuenta bancaria y adeudos en cuatro tarjetas de créditos, sin más detalles.

El secretario de la Defensa Nacional, Salvador Cienfuegos, con ingresos de 2.5 millones de pesos, informa que tiene cuatro casas, aunque el costo lo detalla al precio en las que las compró, la más reciente de las cuales, adquirida en 2006, vale 3.9 millones de pesos. Tiene ahorros por 1.5 millones de pesos y en sus tarjetas de crédito no tiene adeudos.

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