Califica Atom Egoyan a la Cineteca Nacional de “templo de conservación”
tes agradecimientos, pero se tuvo que aguantar, pues el premiado fue otro canadiense, James Cameron, por Titanic.
El director coincidió con una gran mayoría de sus seguidores que consideran a Exótica uno de sus filmes más preciados y el que lo ha consagrado en el cine.
Añadió que comparte con sus padres todos sus logros, ya que ellos, inmigrantes en Canadá de origen armenio, no pudieron realizarse en su profesión de pintores, y contó que antes de la conferencia de la presentación de su ciclo habló con su madre, quien tiene una amiga mexicana –jalisciense, para más señas– quien le comentó que debería de asistir al festival de cine de Guadalajara, en donde han sido expuestas varias de sus películas.
“Estoy al tanto del cine en México; reconozco los trabajos de Guillermo del Toro y otros directores laureados, como González Iñárritu.
Hace dos años Egoyan recibió en Oaxaca, de manos de Francisco Toledo, el reconocimiento Pochote, dedicado a quienes hacen cine digital,
Varias de sus películas han tocado temas políticos, como el caso de Ararat, que trata el tema del genocidio de los armenios .
Sobre al actual gobierno de Canadá, dijo que Justin Trudeau, primer ministro, ha sido sensible en abrirse a las muchas tribus originarias de su país natal. “Es algo que estamos descubriendo, que por años no supimos.”
Egoyan hizo un parénesis en sus actividades para venir unos días a México, pues filma en Rotterdam un corto y dijo que para él –declarado melómano– es grandioso, pues por primera ocasión tiene la oportunidad de trabajar con un orquesta en vivo, la filarmónica de esa ciudad.
ESTOY AL TANTO DEL CINE EN MÉXICO, DIJO, Y MENCIONÓ A DEL TORO Y GONZÁLEZ IÑÁRRITU
Sobre sus próximos trabajos, dijo que elabora un guión basado en la inmigración china en Estados Unidos, sobre la dicotomía que presenta tal fenómeno, pues la corriente asiática se presentó tanto como de emprendedores como de esclavos. De lo primero, agregó, dan muestra la cantidad de negocios, principalmente alimentarios, que hay en ese país, y de lo segundo, las precarias condiciones en que sobrevivió una enorme cantidad de esas personas.
“Me interesa mucho cómo vamos formando nuestras identidades, cómo la gente disfruta y aprende a ver el comportamiento de otras personas”, finalizó.