Plan de posguerra para Siria une a Francia y EU
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y su homólogo francés, Emmanuel Macron, dejaron a un lado sus diferencias sobre el cambio climático durante su reunión de este jueves en Francia y aseguraron que eso no impedirá que trabajen juntos en un plan de posguerra para Siria y sobre cómo mejorar la seguridad en el Medio Oriente.
En una conferencia de prensa conjunta, Trump sostuvo que ambas naciones tienen “ocasionales desacuerdos” que no deterioran su amistad, que data desde la revolución estadunidense. Fue evasivo en cuanto a señalar si Estados Unidos va a regresar eventualmente al Acuerdo de París sobre el cambio climático. Trump dijo a Macron que “si sucede sería excelente, pero si no, también está bien”.
Macron reconoció que tienen diferencias graves en relación al Acuerdo de París, pero que los dos encontrarán otras áreas de cooperación. “¿Acaso eso debería de tener un impacto en las discusiones que tenemos sobre otros temas? Por supuesto que no”, indicó el francés.
Trump llegó a París en una visita de 36 horas para abordar posibles soluciones a la crisis en Siria y estrategias antiterroristas más extensas. Además, tiene planeado asistir a las celebraciones por el Día de la Bastilla en París.
Temas como resolver la guerra civil en Siria y la lucha contra el terrorismo dieron a los mandatarios áreas de cooperación.
Macron informó que trató con Trump un plan para Siria que ayudaría a estabilizar la situación luego de que termine la guerra. Él ha abogado por una intervención en Siria diciendo que el presidente Bashar Assad es una amenaza para su propio país y que el Estado Islámico es una amenaza para Francia.
Francia ha sufrido ataques extremistas en años recientes. Durante las celebraciones del Día de la Bastilla del año pasado, más de 80 personas murieron en Niza cuando un camión de 19 toneladas arremetió contra la gente.
Macron expresó que no hay “ninguna brecha” entre Estados Unidos y Francia para “combatir al terrorismo”. Aunque la fiscalía, apoyándose en el dictamen del jurado que consideró probada la culpabilidad de los cinco imputados por el asesinato del político opositor Boris Nemtsov –hace dos años y cinco meses–, solicitó que se les condenara a cadena perpetua, el juez sorprendió a todos al dictar sentencia.
Según Yuri Zhitnikov, de la Corte Militar regional de Moscú, ni el sicario ni las personas que participaron en la logística del crimen merecen el máximo castigo que contempla la legislación local desde que Rusia anunció una moratoria sobre la pena de muerte.
Por tanto, Zaur Dadayev, el autor material de los seis balazos que segaron la vida de Nemtsov, recibió 20 años de cárcel y sus cuatro cómplices, diferentes pe-