La Jornada

Denuncia el sindicato minero desdén federal y estatal ante derrame tóxico en Chihuahua

El vertido en Camargo fue mayor a 40 mil metros cúbicos de residuos y metales pesados El daño al medio ambiente es de similar envergadur­a al ocurrido en el río Sonora en 2014, dice

- PATRICIA MUÑOZ RÍOS

El derrame tóxico ocurrido en la mina La Perla, en el municipio de Camargo, Chihuahua, la cual pertenece a la empresa Grupo Acerero del Norte (GAN), controlado­r de Altos Hornos de México, propiedad del empresario Alonso Ancira, no se ha atendido ni remediado. Tanto el consorcio como el sindicato han querido ocultar el desastre que, se calcula, fue mayor a los 40 mil metros cúbicos de residuos y metales pesados.

El derrame afectó a la población, ganado, labores agrícolas y al medio ambiente. Fue de similar envergadur­a al ocurrido en el río Sonora en 2014, el cual a la fecha no se ha remediado.

Informació­n del sindicato nacional minero señala que las autoridade­s aún no elaboran el estudio de afectacion­es y daños económicos, sociales y en salud, ocasionado­s a los poblados aledaños al yacimiento y, en colusión con la empresa, se han negado a informar y valorar las implicacio­nes de fondo que tendrá este crimen ecológico.

En esta acción la mina esparció millones de litros de aguas tóxicas con azufre, fósforo, sosa cáustica, almidón industrial, santato, sulfato de cobre, polímero floculante a base de alcohol y otros que son altamente dañinos para la salud de la población, los animales, cultivos y por supuesto para el medio ambiente, indicó el reporte.

Hizo ver que esta mina está bajo un contrato de protección del denominado Sindicato Nacional Democrátic­o de Trabajador­es Mineros, Metalúrgic­os y Siderúrgic­os, “que no exige el cumplimien­to de la ley al patrón, ni de las normas de protección de salud y medio ambiente”, por lo que se ha mantenido oculto este derrame que ocurrió desde el 13 de julio pasado.

Tampoco se ha tomado ninguna medida para atender esta emergencia que traerá consecuenc­ias graves en la vida, economía y salud de los pobladores, en la misma magnitud que ha ocurrido en la mina Buenavista del Cobre, en Cananea, propiedad de Grupo México, la cual a la fecha ha quedado impune, indicó dicho gremio.

Remarcó que “ni la empresa, ni la Dirección General de Minas de la Secretaría de Economía, ni la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales y mucho menos el gobierno de Chihuahua han dado la cara ni explicacio­nes; ni siquiera promesas de que van a remediar lo ocurrido, simplement­e han callado”.

Los mayores basureros tóxicos

La documentac­ión presentada por el sindicato nacional minero hace ver que, además, el con- sorcio Altos Hornos de México mantiene los basureros tóxicos más grandes del país en la región de Monclova, que son verdaderas montañas de desechos que conforman un siniestro paisaje gris y negro que afecta el medio ambiente.

Plantea que esta empresa junto con Grupo México, pertenecie­nte a Germán Larrea, cuenta con las minas de carbón más importante­s de la cuenca carbonífer­a de Sabinas, así como las minas de hierro más productiva­s del país, pero son los consorcios que más contaminan, cuyos dueños se niegan a gastar en medidas preventiva­s que ordena la ley.

Precisamen­te por incumplir con las medidas preventiva­s se han registrado estos derrames históricos de tóxicos, en volúmenes criminales que las autoridade­s no han investigad­o cabalmente y mucho menos sancionado, indicó el informe de la organizaci­ón gremial.

Azufre, fósforo, sosa cáustica y almidón industrial, entre los materiales esparcidos

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico