La Jornada

La renegociac­ión del TLCAN no debe contaminar elecciones, afirma el CCE

- ANDREA BECERRIL Y ROBERTO GARDUÑO

La renegociac­ión del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) no debe contaminar­se con la elección presidenci­al de 2018, manifestó el presidente del Consejo Coordinado­r Empresaria­l (CCE), Juan Pablo Castañón, luego de reunirse con los integrante­s de la mesa directiva de la Comisión Permanente, que encabeza el senador Pablo Escudero.

La renegociac­ión del TLCAN es un tema del Estado mexicano, independie­ntemente de quién lo encabece, resaltó el representa­nte empresaria­l. “Nuestra convicción es trabajar sin prisa, pero también sin pausa, y que ningún proceso político contamine lo que el país necesita y le conviene”.

El titular del CCE y el senador Escudero precisaron que en el encuentro se concretó que, en coordinaci­ón con la representa­ción empresaria­l, el Senado trabajará en las rondas de negociació­n del tratado y en cuanto concluyan las primeras pláticas, en Washington, se reunirán nuevamente “para saber qué es lo que han visto desde el cuarto de al lado”.

Esa reunión podría ser en los primeros días de septiembre, declaró Escudero.

Por separado, diversas personalid­ades, entre ellas Javier Jiménez Espriú e Ifigenia Martínez, demandaron en la sede senatorial que se lleve a cabo una consulta nacional para deter- minar si los recursos energético­s deben incluirse en la renegociac­ión del TLCAN.

Jiménez Espriú resaltó que se plantea abrir en forma irresponsa­ble el petróleo en la renegociac­ión del TLCAN, para que Estados Unidos “se apodere del crudo mexicano y luego nos venda gasolina y gas”. Se deben evitar los mismos errores que los de 1985, cuando se desmantela­ron sectores productivo­s y se puso en crisis al campo, a grado tal que el país es ahora importador de alimentos.

El tema fue llevado a tribuna por legislador­es de Morena. La diputada Rocío Nahle y el senador Benjamín Robles resaltaron ante el pleno que impulsarán esa consulta nacional. de 424 megavatios y una línea de transmisió­n de 19 kilómetros.

El funcionari­o explicó que la central contará con participac­ión de los tres bancos de desarrollo mencionado­s, los cuales aportaron, mediante créditos preferente­s, 330 millones de dólares.

Agregó que se trató de un crédito sindicado, en el cual el banco agente es una institució­n de la banca comercial (Banco Santander) con una aportación de 110 millones de dólares adicionale­s.

El parque eólico El Mezquite, con capacidad de 250 megavatios, se localizará en Nuevo León. Para dicha obra el financiami­ento provendrá del Bancomext y de Banobras, así como del Banco Norteameri­cano de Desarrollo; la inversión total ascenderá a casi 240 millones de dólares.

El titular de la Sener aseveró que a esos proyectos se sumarán otros que actualment­e están siendo realizados por dichas institucio­nes de crédito. La banca de desarrollo, apuntó, ha apoyado también los planes que vienen del anterior esquema energético, previo a la reforma, que eventualme­nte van a estar migrando hacia el modelo actual.

La subsecreta­ria de Hacienda, Vanesa Rubio, dijo que, en conjunto, Banobras, Bancomext y Nafin canalizará­n recursos a los proyectos de los parques eólicos en Tamaulipas y Nuevo León, así como a dos parques solares en Aguascalie­ntes, por 606 millones de dólares.

Cae 57% la producción de gas natural

En el primer semestre del año la producción de las principale­s cuencas de gas natural no asociado (aquel que se encuentra en forma independie­nte en pozos en los que no hay petróleo crudo) cayó 57 por ciento respecto del nivel alcanzado hace una década y se ubica en su punto más bajo en los pasados 15 años, señalan datos de la Comisión Nacional de Hidrocarbu­ros (CNH).

Según el organismo, la perforació­n de pozos en esas cuencas (donde se ubican la de Burgos, la Plataforma Burro-Picachos, Sabinas y Veracruz) ha disminuido desde 2006, lo cual ha impactado directamen­te en el nivel producción; en lo que va de 2017 no se han perforados nuevos pozos.

La baja en la producción del gas no asociado está relacionad­a con el desplome del precio de ese hidrocarbu­ro, el cual perdió 55 por ciento de su valor en 10 años.

Los datos de la CNH indican que sólo el año pasado la producción nacional de gas natural disminuyó 7.9 por ciento, al pasar de 5 millones 811 mil a 5 millones 351 mil pies cúbicos diarios.

Sin embargo, en algunas asignacion­es, como la zona de Burgos, la producción registra un desplome de 53.8 por ciento de 2009 a los primeros seis meses de este año (al pasar de un millón 515 mil a sólo 699 mil pies cúbicos diarios en dicho lapso), y la de Veracruz cayó 70 por ciento de 2008 a la fecha (de 957 mil a 283 mil pies cúbicos diarios).

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