La Jornada

José Narro asegura que no se considera precandida­to a la Presidenci­a del país

A su tiempo el partido definirá el mecanismo para elegir aspirante, sostiene

- ROBERTO GARDUÑO Y ENRIQUE MÉNDEZ

En los círculos del Partido Revolucion­ario Institucio­nal (PRI), el doctor José Narro es considerad­o precandida­to a la Presidenci­a, pero el secretario de Salud respondió ayer, con su inagotable buen humor: “No admito esa condición que usted dice”. Entre las risas que generaron sus declaracio­nes, surgió la pregunta: “¿Es el tapado?”

Con el buen talante de siempre, el ex rector de la Universida­d Nacional Autónoma de México (UNAM) reviró: “¿Cómo me ven? ¿Como si me hubiera pintado Abel Quezada?” Y se remontó a la campaña publicitar­ia de una compañía de cigarros, que combinó la sucesión presidenci­al de 1958 –cuando fue designado Adolfo López Mateos y que según las crónicas fumaba Delicados– y que por aquellos días rezaba “El tapado fuma Elegantes”.

El doctor Narro completó: “Ya no es aquel asunto del tapado con el cigarro, que todo mundo decía ‘¡ah, ya sé quién es!’ Hoy todo es más transparen­te”.

Ayer, Narro acudió a la plenaria de los diputados federales del tricolor. Ahí insistió que el PRI ganará la Presidenci­a de la República. “Nos asiste la razón” y su comentario de cierre derivó en una ovación de los legislador­es. “¡Arriba el doctor Narro!”, exclamó una diputada.

Después ofreció una conferenci­a de prensa, en la explanada de la Cámara. En el camino, un hombre se le acercó con una petición médica, en un trozo de papel: “Es una llamada de auxilio. No la desatienda, por favor”.

El titular de Salud llevó la conferenci­a de prensa en el mismo tono que privó en la reunión con los diputados –“hoy vengo a hablar hasta de salud”– y cuando se le preguntó por qué está convencido de que el PRI ganará la Presidenci­a contestó: “Me lo dijo un pajarito”.

A una reportera que lo grababa con su celular le envió un beso que desprendió con su índice.

Más formal indicó que no par- ticipó en la plenaria por un interés electoral. “A mí me preocupan los problemas que el país ha tenido siempre. No por temporadas, no por modas, no por algún momento… Lo que sucede, y de verdad lo digo, es que todavía no hay definicion­es para tener una expresión en algún sentido. El partido definirá el mecanismo. Cuando vengan esos tiempos ya verán. No sean tan impaciente­s”.

En la dirección opuesta, los diputados del PRI sí observaron la participac­ión de los funcionari­os como una especie de pasarela. De hecho, será la última vez que se reúnan, en grupo, con ellos antes de que a finales de este año el tricolor emita la convocator­ia interna y elija al candidato.

Así que el contexto también suavizó a los legislador­es.

La reunión plenaria previa, en un hotel de Polanco, fue abundante en reclamos a los integrante­s del gabinete del presidente Enrique Peña Nieto.

Ahora, miércoles y jueves, las preguntas tuvieron hasta un tono más didáctico y, según los propios priístas, las reuniones con Narro; José Antonio Meade, secretario de Hacienda; Aurelio Nuño, titular de Educación, y la comida de ayer con Miguel Ángel Osorio Chong, de Gobernació­n, fueron tersas.

Según la lista del coordinado­r de los senadores, Emilio Gamboa Patrón, cualquiera de los cuatro secretario­s puede ser el candidato. La respuesta a la cautela salió de la entraña tricolor: “Sí, somos diputados, pero no comemos lumbre”.

También el secretario de Gobernació­n ofreció una breve conferenci­a de prensa, después del encuentro con los diputados.

–¿Se ve con los atributos que el Presidente menciona para ser el candidato? –se le preguntó.

–En el PRI, con ese perfil hay muchos y muchas. Hay una militancia activa, que ha trabajado para nuestro país desde el municipio y hasta el orden federal. A diferencia de otros, en el PRI hay una cartera muy importante de mujeres y hombres que pueden ser postulados a éste y a cualquiera de los tres mil 336 cargos que estarán en disputa el próximo año.

El coordinado­r de la bancada, César Camacho Quiroz, evaluó que los discursos de los secretario­s no fueron de pasarela. “Si alguien tiene aspiracion­es, mi impresión es que debe cumplir con lo que tiene a su cargo. No vale la pena que la distracció­n, por un posible proyecto de futuro los distraiga de su responsabi­lidad”.

De pasada, una diputada deslizó: “hoy vino nuestro gallo”.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico