Esquinas, puntos críticos en el sismo
Debe corregirse el reglamento de construcciones: Seduvi
Una de las enseñanzas que deja el sismo del 19 de septiembre es que muchos de los edificios que colapsaron estaban ubicados en esquinas, mientras otros sufrieron daños en las plantas bajas, que eran estacionamientos o áreas comerciales, lo que constituirá una enseñanza para hacer las correcciones necesarias en el reglamento de construcciones vigente, afirmó el titular de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda (Seduvi), Felipe de Jesús Gutiérrez.
Indicó que 90 por ciento de los 13 mil inmuebles afectados por el reciente sismo se construyeron en épocas anteriores a 1985, por lo que fueron hechos con ‘‘coeficientes de diseño estructural’’ en los que claramente tendrían que adoptarse medidas de restructuración o reforzamiento.
La semana que concluyó se iniciaron conversaciones con expertos del Instituto de Ingeniería de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y de la Sociedad Mexicana de Ingeniería Estructural, para que a partir de los efectos del sismo se pueda tener claridad para replantear algunos conceptos en la normatividad vigente, apuntó.
Por su parte, el ingeniero estructuralista Iván Forcada, de la empresa especializada en capacitación de estructuras y portales de información ConstruAprende, Ingeniería Civil y Arquitectura, llamó al gobierno local a reformar el Reglamento de Construcciones del Distrito Federal, con la finalidad de crear el registro público digital de los planos de cada nuevo edificio que se construya en la capital, así como el acopio de fotografías de cómo y cuando se llevó a cabo la edificación, con el fin de que los capitalinos tengan acceso al cálculo estructural del edificio donde estén interesados en comprar un departamento.
Expuso a quienes estén por comprar un inmueble que exijan ver los planos de construcción, y de no ser atendida esta demanda no arriesgarse a realizar la compra. Agregó que un sinnúmero de edificios construidos antes de 1985, no cumplían con las disposiciones vigentes ese año y a la fecha no hay nada que los obligue a cumplir con el nuevo reglamento de construcciones.