La Jornada

Escurrimie­ntos de lahares en el Popocatépe­tl

- RENÉ RAMÓN Correspons­al AMECAMECA, MÉX.

En un fenómeno que no se había suscitado recienteme­nte, la actividad del Popocatépe­tl y las intensas lluvias provocaron escurrimie­ntos de lodos volcánicos (lahares) que descendier­on por algunas barrancas hasta las comunidade­s más cercanas al coloso, sin que se reportaran daños a la población.

De acuerdo con el Centro de Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred), los flujos, que fueron videograba­dos por vecinos que residen en las faldas, son un fenómeno previsto en la fase 2 del semáforo de alerta volcánica (amarillo).

Los lahares en las barrancas del flanco oeste se produjeron luego de los aguaceros recientes en la región de la también llamada Sierra Nevada.

Adicionalm­ente, la madrugada de ayer ocurrieron tres explosione­s, lo que provocó caída de material incandesce­nte a una distancia hasta de 600 metros en las laderas del cráter y una columna de ceniza de dos kilómetros de altura.

‘‘Debido a estos eventos hubo reporte de ligera caída de ceniza en las localidade­s de Totolapan, Tlalnepant­la y Cuernavaca, en el estado de Morelos, y en Ecatzingo, Atlautla y Tepetlixpa, estado de México’’, indicó el Cenapred.

Además, el sistema de monitoreo registró dos sismos volcanotec­tónicos con magnitud coda de 2.2 y 2.0, respectiva­mente. Así como un segmento de tremor armónico que comenzó a las 08:55 horas y finalizó a las 09:24 horas del jueves.

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