Hablen, reclamo nacional a Rajoy y la Generalitat
Cientos de miles salen a las calles y pintan de rojo y blanco España
Centenares de miles de personas salieron a las calles de España para expresar su preocupación y deseo de diálogo, en algunos casos, y su malestar y la exigencia de “prisión a los separatistas”, en otros.
El color rojo inundó la Plaza de Colón, en Madrid, y ahí, mientras ondeaban banderas españolas y algunos símbolos franquistas, más de 150 mil personas, según los organizadores, y 50 mil, según la policía, exigieron la suspensión de la autonomía en Cataluña, el encarcelamiento de los dirigentes independentistas que han impulsado el proceso de secesión e invocaron la “unidad de España”.
El color blanco, que simboliza el diálogo, la paz y la concordia, fue el elegido por otros tantos miles de ciudadanos que se concentraron bajo otra convocatoria en la mayoría de los ayuntamientos del país con una exigencia a los dirigentes políticos, de ambos bandos a dialogar cuanto antes.
El conflicto entre Cataluña y el Estado español se ha trasladado a todas los pueblos y ciudades de España. En esta ocasión hubo dos grandes convocatorias, con mensajes distintos y con un espíritu diametralmente opuesto.
Los que eligieron el color blanco para expresar su preocupación por la situación y que se concentraron en la mayoría de los ayuntamientos del país en una convocatoria ciudadana exigieron sólo una cosa: dialogar, que se busquen salidas negociadas a un conflicto que va en aumento y que temen que se convierta en un enfrentamiento civil con consecuencias más graves.
Rojo y amarillo fueron los colores de la otra gran movilización ciudadana, en todo el país y
Hubo dos grandes convocatorias con espíritu diametralmente opuesto Prisión para los “separatistas” y fin de la autonomía, el lado más duro
con gran afluencia en las principales ciudades, pero su mensaje fue más duro: prisión para los “separatistas”, la exigencia de que el gobierno del derechista Mariano Rajoy suspenda cuanto antes la autonomía de Cataluña, tras aplicar el artículo 155 de la Constitución española, y que se convoquen elecciones en la región secesionista para renovar al gobierno y a una clase política que ha sido incapaz de resolver el conflicto.
A dos días del anuncio de los secesionistas catalanes de que declararían desde el Parlamento regional la independencia unilateral, la ciudadanía que no comulga con los separatistas se ha movilizado como nunca antes. Quedan a la espera de que este domingo los políticos y ciudadanos contrarios a la independencia en Cataluña se manifiesten en Barcelona bajo el lema “recuperemos la cordura” y retomemos el diálogo.
El acto fue organizado y convocado por la Fundación Denaes y respaldado por distintas asociaciones como Convivencia Cívica Cataluña, Hazte Oír o el Foro de Guardias Civiles, que invocaron a la ciudadanía para “defender la nación, la Constitución y el Estado de derecho”.
Esta convocatoria fue apoyada por el derechista Partido Popular (PP) y por Ciudadanos, pero también fue respaldada por las agrupaciones de extrema derecha, como Falange Española o Democracia Nacional.
Al final de la manifestación se dio paso a los discursos; entre los oradores estuvo Francisco Caja, presidente de Convivencia Cívica Cataluña, quien aseguró que “esto no se solucionará con diálogo” y que “eso que se llama presidente de Cataluña tendría que estar en prisión”. También intervino el escritor José Javier Esparza, quien pidió un “reconocimiento a los agentes que se han visto vilipendiados por proteger