ANAYETZIN: FEMINICIDIO E IMPUNIDAD
El viernes 6 de octubre Anayetzin Damaris Fragoso salió de su casa para pasar un fin de semana con su pareja sentimental, Omar Arreola. Desde entonces no se le volvió a ver. Se reportó su desaparición el domingo y más tarde fue encontrada sin vida dentro de un armario en la casa de Omar, en la calle Riobamba, colonia Lindavista. La joven tenía mínimo 16 heridas de arma punzocortante y estaba envuelta en una sábana. La conocí en la escuela. “Anita”, como le decíamos, era una estudiante prometedora, tranquila, amable, reservada y atenta. Se graduó de ingeniería y ejerció su carrera profesional con ética. Para nosotros, sus amigos y compañeros, esta situación nos consterna sobremanera, nos llena de rabia y coraje, de tristeza y desesperanza ¿En qué país se permite que un crimen como éste quede impune?
¿Acaso el asesino estaba tan seguro de la impunidad que reina en México que decidió privar de la vida a su novia en su propia casa y dejar allí mismo el cadáver sin esperar mayores consecuencias? ¿Qué nivel ha alcanzado la violencia de género en nuestro país? ¿Qué han hecho nuestros “gobernantes” para disminuir esta situación? Por lo pronto, este no es un feminicidio más en la larga lista de los cometidos a lo largo y ancho del país, sino una mujer, una colega, una hija y una amiga menos. La comunidad politécnica está de luto con la pérdida de nuestra querida amiga. Como compañero, amigo y colega de Anayetzin exijo a las autoridades esclarecer este atroz feminicidio y castigar al o los culpables. Exijo al aún jefe de Gobierno, Miguel Angel Mancera, retome este caso y dé solución a la dolida y consternada familia de Anayetzin ¡Basta de violencia, basta de feminicidios, basta de tanta impunidad! ¡Hasta siempre, Anita!