El Conapred insta a los legisladores a ofrecer una disculpa a los ciudadanos
El incidente equivale a despreciar los esfuerzos educativos
nunca gritan lo que dicen que gritaron, la expresión fue distinta.
Sin embargo, la ex secretaria general del PRI y secretaria de la Comisión de Igualdad de Género, Carolina Monroy del Mazo, aceptó que, durante la discusión del Presupuesto de Egresos 2018, un grupo de diputadas priístas le gritó a Ariel Juárez: “¡eeeeeeh… puto!” Pero “él insultó primero”.
De inmediato intentó corregir: “Fue una broma. Yo estaba en la fila de atrás. Fue un juego de ellas. No fue una seña homofóbica, sino un juego. Él es un patán. Habría que evitar que gente como Ariel venga a la Cámara. Hay dos o tres de Morena preparados, pero lo que vienen es a buscar bulla. Creo que no podemos aspirar a un cargo de elección popular sin un título profesional”.
–¿Las diputadas que gritaron sí tienen una profesión? –se le cuestionó.
–No es que las perdone. Son mis amigas, pero ya nos cansamos de tanta majadería de Morena.
–¿Porque están enojados le pueden decir “puto” a un diputado?
–Ojalá él tampoco nos dijera ladrones.
–¿Así que fue culpa de Ariel Juárez?
–Es que lo fue. Es su estrategia. Ese tipo de gente me molesta mucho. Me dan dolor de cabeza. No tienen educación. En las comisiones ni opinan, porque no son gente formada. La Asamblea Consultiva del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred) conminó a los legisladores que participaron en el grito homofóbico expresado en la Cámara de Diputados el pasado 9 de noviembre, a ofrecer disculpas a la ciudadanía y que se comuniquen de manera amplia y suficiente las medidas que se adoptarán, no sólo para evitar que se repita, sino para impulsar una forma de expresión conforme a la Constitución, las leyes reglamentarias y el propio reglamento de la Cámara de Diputados.
Este hecho, expuso el Conapred en un pronunciamiento, equivale a una expresión de desprecio a los esfuerzos educativos en materia de no discriminación.
Un año después de la votación de integrantes de la Comisión de Puntos Constitucionales de la Cámara de Diputados, con el cual se rechazó el dictamen sobre la iniciativa del matrimonio igualitario “y que desfavoreció el ejercicio y promoción de los derechos humanos en nuestro país, resulta preocupante que los legisladores utilicen expresiones homofóbicas con el propósito de denostar. Como funcionarias y funcionarios públicos, los legisladores deben actuar en un marco de respeto de derechos humanos que contribuya a la consolidación de un Estado democrático e incluyente”, agregó.
La asamblea consultiva –integrada por representantes de los sectores privado, social y académico– reiteró que reproducir prejuicios y estereotipos contribuye a fomentar la discriminación hacia las personas por su condición u orientación sexual y de género, y lesiona el tejido social.