CDMX SE HA VUELTO CAÓTICA
Después de los terremotos sucedidos en septiembre del año en curso, los daños siguen acumulados en cuanto a la tardanza del restablecimiento de las viviendas, para los sectores o capas de la población que resultaron afectados por los sismos.
Hasta ahora se desconoce que el gobierno de CDMX esté implementando algún plan de vivienda de carácter social, es decir, para los solicitantes de ésta, antes y después del desastre que dejaron dichos movimientos telúricos, lo que preocupa es que las inmobiliarias y constructoras privadas se enriquecen, a costa de la necesidad de la población, en cuanto a la solicitud de departamentos o casas habitacionales, en muchas ocasiones éstas operan en contubernio con las autoridades que gobiernan la ciudad, eso por una parte, y por otra, los renteros que suben los precios a los inquilinos y que afectan la economía de “los sin techo propio”. Algunos que perdieron todo: casa, muebles, ropa, calzado, etcétera, les proponen que adquieran créditos bancarios; es decir, el endeudamiento que provoca zozobra sobre las familias de escasos recursos. Habría que decirlo, desde la llegada del neoliberalismo, hace 30 años, empezó el rezago o nulidad de construcción de casas o departamentos, para las familias de los trabajadores.
Hace falta la formación de un equipo de científicos que busquen la forma de resolver el problema de crecimiento anárquico de la ciudad, pero sin paralizar o negar la obtención de vivienda, pues es un derecho que debe ser garantizado.
Otro problema que no termina por resolver el gobierno capitalino es la reconstrucción o mejoramiento funcional de las escuelas afectadas, muchas de estas están abandonadas en varias delegaciones, cuando debió ser prioritario que las primarias y secundarias tuvieran rápida atención, pues se trata de los niños y niñas, para que estos tengan un lugar digno donde estudiar y un lugar importante para sentirse orgullosos, escuelas con equipamiento y bibliotecas modernas. donde pocos pacientes tienen acceso a un tratamiento (…) el cáncer es, en consecuencia, uno de los padecimientos que reflejan la desigualdad económica que afecta al mundo.
En el mismo acto, el oncólogo y presidente de Uruguay, Tabaré Vázquez, calificó a los países desde el punto de vista oncológico, como “oncológicamente desarrollados” y “oncológicamente subdesarrollados”. En los “desarrollados” la prevención, la información, la educación y el diagnóstico oportuno es accesible a “amplísimos sectores de la población”.
A Héctor Montoya Robles, wixárika (huichol que padece leucemia granulocítica crónica), paciente No. 7597700301 del HGZ1 del IMSS en Zacatecas, no le entregan (desde el 6 de octubre) el Dasatinib, argumentando que Novartis no lo surte.
Con ese criterio podemos calificar a las instituciones de salud mexicanas como “oncológicamente subdesarrolladas” el socavón del tamaño de su sexenio, que el presidente Enrique Peña abrió por el menosprecio que tuvo para abordar la situación con más empeño y voluntad. Un socavón que políticamente lo ha mantenido en la mira nacional e internacional, sobre todo con respecto a los inmigrantes centroamericanos que desaparecen o son asesinados durante su travesía por México a Estados Unidos; o los 43 normalistas desaparecidos de Ayotzinapan, Guerrero, que siguen sin aparecer y que el gobierno ha tratado, sin lograrlo, de dar carpetazo con su “verdad histórica”. No es gratuito que el Presidente haya signado dicha ley en estos momentos más como una táctica político-electoral, que por lo que mencionó hacerlo. Puros golpes de pecho, cuando bien sabe que los desaparecidos son una herida constante en México, que ha causado tanto dolor y tanto enojo, en contra, sobre todo, de los gobiernos priístas que es durante los cuales se han dado más estos casos: ejemplo de ello la llamada guerra sucia de los años setenta. Tadeco invita a la temporada de la obra Acteal, adaptación libre basada en textos de Adriana Becerra y José Antonio Reyes. Dirección de Margarita Hernández. El domingo 19 de noviembre a las 19:30 horas, el el foro El Albergue del Arte, ubicado en Alberto Zamora 32, colonia Villa Coyoacán.
Informes y reservaciones: Tel. 5554228. Entrada libre.