Cunden protestas contra EU e Israel
Washington queda aislado en la Organización de Naciones Unidas
Al menos dos personas murieron y cientos resultaron heridas ayer durante los multitudinarios enfrentamientos entre palestinos y elementos de seguridad israelíes en varios puntos de Palestina, jornada denominada Día de la Ira, convocada por el movimiento islamita Hamas para protestar contra la decisión del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de reconocer –el miércoles pasado– Jerusalén como capital de Israel.
El Ministerio de Sanidad palestino confirmó los decesos de Mahmud al Masri y Maher Atallah, de 30 y 54 años, respectivamente, a causa de disparos de militares en distintas movilizaciones en la franja de Gaza, cerca de la frontera con Israel.
Los choques fueron graves. La dependencia reportó casi 170 lesionados. Varios se encuentra en estado grave. Palestinos lanzaron piedras y neumáticos incendiados contra los uniformados, quienes respondieron con disparos de municiones reales, balas de goma y latas de gas lacrimógeno.
Por la noche aviones de guerra atacaron con misiles dos puestos militares de Hamas ubicados en el norte de la zona limítrofe, uno de ellos en Beit Hanun, lo que dejó 14 heridos más del lado palestino. Esta ofensiva respondió a los seis cohetes lanzados hacia el sur de Israel, reportó el ejército israelí.
“Quien quiera que traslade su embajada a la ocupada Jerusalén se volverá enemigo”, expresó el líder de Hamas, Fathy Hammad, mientras manifestantes quemaron afiches de Trump y la bandera de Estados Unidos en Gaza.
Al finalizar las plegarias del viernes en la mezquita de Al Aqsa, en Jerusalén, los fieles se congregaron frente a las puertas de Ciudad Vieja y lanzaron consignas: “Jerusalén es nuestra, Jerusalén es nuestra capital” y “No necesitamos palabras vacías, necesitamos piedras y (rifles) Kalashnikov”, lo cual derivó en una trifulca con fuerzas policiacas.
Cientos de palestinos resultaron afectados por las grescas
Y
Decenas de miles de personas se manifestaron ayer en varios países árabes y musulmanes, desde Jordania hasta Malasia, en protesta contra la decisión del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de reconocer Jerusalén como capital de Israel, y para expresar su solidaridad a la comunidad palestina.
En Jordania, unas 20 mil personas se movilizaron en su capital, Amán, y en otras ciudades al grito de “Jerusalén es la capital de Palestina”. Los inconformes llevaban pancartas, en las que se veían banderas israelíes y estadunidenses con la consigna: “¡Al diablo!”
“Sacrificaremos nuestra alma y sangre por tí, Al Aqsa (recinto sagrado localizado en la Explanada de las Mezquitas, en Jerusalén)”, clamaron fieles musulmanes durante una protesta en la mezquita Al Azhar, ubicada en El Cairo, Egipto.
Ahmed al Tayeb, imán de Al Azhar, informó en un comunicado que no se reunirá con el vicepresidente estadunidense, Mike Pence, quien viajará a Egipto a finales de diciembre.
Miles de personas también protestaron en las calles de Líbano, Argelia, Siria, Irak, Irán, Afganistán y Pakistán con quema de banderas de Estados Unidos e Israel. Corearon: “Muerte a Estados Unidos” y “Muerte a Israel”.
En Kuala Lumpur, capital de Malasia, cerca de 5 mil personas marcharon al grito de “No toquen Jerusalén” o “Derroquen al presidente Trump”. En Yakarta, principal ciudad de Indonesia, cientos de personas protestaron frente a la embajada estadunidense, donde mostraron pancartas con mensajes como “No a Trump”.
Miles desfilaron por calles de Estambul, capital de Turquía, con las proclamas “Jerusalén es nuestro honor”, “Abajo Estados Unidos, abajo Israel”. En Bruselas, Federica Mogherini, jefa de política exterior de la Unión Europea, afirmó que el traslado de la embajada estadunidense será un “obsequio” para extremistas y aquellos que no están interesados en la paz.
Por otro lado, Estados Unidos quedó aislado ayer en la Organización de Naciones Unidas (ONU) luego que los demás miembros del Consejo de Seguridad criticaron a Washington por su decisión de reconocer a Jerusalén como capital de Israel.
Suecia, Francia, Italia, Reino Unido, Bolivia, Uruguay, Egipto y Senegal, que convocaron a la reunión de urgencia, consideraron que el anuncio de Trump es una “violación a la legitimidad internacional”.
Es una decisión que “no favorece la perspectiva de paz en la región y no va con las resoluciones del Consejo de Seguridad”, afirmaron los embajadores de esos países en un documento. contra las fuerzas de seguridad en Jerusalén este y Cisjordania reocupada, según el Ministerio de Sanidad palestino. Las riñas dejaron 69 heridos de bala y 271 lesionados por disparos de balas de goma, 726 atenciones por inhalación de gas lacrimógeno y 22 por golpes de proyectiles.
“Hoy, en el 30 aniversario de la primera intifada, el pueblo se levanta en rechazo a la declaración de Trump. Jerusalén es la capital de Palestina, la de los árabes y musulmanes”, señaló Ahmad Bahar, representante de alto rango de Hamas, durante el rezo.
El movimiento armado islamita convocó a un nueva intifada, como las de 1987-1993 y 20002005, que dejaron miles de palestinos e israelíes muertos, para responder a la decisión de Trump.
El cambio de la embajada, antes de 2019: Tillerson
El secretario de Estado estadunidense, Rex Tillerson, afirmó que el traslado de la embajada de Estados Unidos de Tel Aviv a Jerusalén será antes de 2019, y aclaró que cualquier decisión final sobre el estatus de la ciudad sagrada dependerá de las negociaciones entre israelíes y palestinos.
“No es algo que vaya a suceder este año ni probablemente el próximo, pero el presidente (Trump) quiere que avancemos de forma concreta y determinada”, indicó después de que se reunió en París con el canciller francés, Jean-Yves Le Drian.
Explicó que primero debe construirse el edificio diplomático y después se solicitarán los respectivos permisos para operar. Además, declaró: “Trump no indicó ningún estatus final para Jerusalén. Fue muy claro en que el estatus final, que incluye las fronteras, sería negociado y decidido por las dos partes”.
Trump publicó en su cuenta de Twitter un video para mostrar cómo sus tres antecesores, Bill Clinton (1993-2001), George W. Bush (2001-2009) y Barack Obama (2009-2017), señalaron a Jerusalén como la capital de Israel durante sus campañas presidenciales, pero nunca hicieron el traslado de la representación diplomática durante sus gobiernos.
“Cumplí la promesa de mi campaña. ¡Otros no!”, escribió en el mensaje. El mandatario reconoció a Jerusalén como capital de Israel en desafío a la comunidad internacional, que admite a Tel Aviv como la capital israelí debido a que el este de Jerusalén también es reclamado por los palestinos como su capital, por lo que anunció el traslado de su embajada, en un paso unilateral que rompe con la política seguida por Washington en las pasadas siete décadas.