MÉXICO SA
◗ Economía: escalón 15, de 20 FC-EPN: “potencia” fallida ◗ López Obrador, una vez más
hora que José Antonio Meade promete “llevar a México al lugar de potencia mundial” para que “todos vivamos mejor”, vale recordar que los seis últimos inquilinos de Los Pinos ofrecieron lo mismo, con resultados diametralmente contrarios a los comprometidos. De hecho, el pronunciamiento más reciente fue del propio Enrique Peña Nieto, quien (2 de septiembre de 2017) aseguró que “de mantenerse y profundizarse los cambios realizados”, el nuestro “podrá convertirse en un país plenamente desarrollado en menos de dos décadas”.
Seis años antes, en abril de 2011, el haiga sido como haiga sido, Felipe Calderón dijo que “México cuenta con todo para convertirse en una potencia mundial en la segunda década del siglo XXI”; es decir, mucho antes de lo prometido por Peña Nieto, aunque de cualquier suerte su “revelación” fue totalmente fallida, al igual que las anteriores (de Miguel de la Madrid a Vicente Fox).
Entonces, seis sexenios al hilo prometiendo e incumpliendo, para que ahora llegue el creativo José Antonio Meade a ofrecer exactamente lo mismo. La diferencia, en todo caso, es que el cinco veces secretario de gabinete no le puso fecha a su “compromiso”, como sí lo hicieron el par de inquilinos de Los Pinos a los que sirvió y, se supone, ayudó a convertir a México en “una potencia mundial”.
De hecho, como ayuda de memoria, los resultados económicos de los gobiernos calderonista y peñanietista (en los que, entre otras cosas, sirvió Meade como secretario de Hacienda) son, después de Miguel de la Madrid, los peores de los seis sexenios involucrados en eso de la “potencia mundial”, con un “crecimiento” anual promedio de 1.9 y 2.1 por ciento, respectivamente.
Pero en vía de mientras, a la “potencia mundial” en ciernes le falta muchísimo camino por recorrer para materializar los planes de los citados seis inquilinos de Los Pinos, más Meade (si llega a ocupar la residencia oficial). Ello, porque para el cierre del sexenio peñanietista las proyecciones más optimistas de la Cepal ubican a México en el escalón número 15, de 20 posibles, entre las economías latinoamericanas (17 de 33 si se incluye el Caribe), con todo y que el paquete de “reformas” fue aprobado y puesto en marcha (de hecho, en 2014, año de la “aprobación”, nuestro país se colocó en el peldaño número 11).
Resulta que la Cepal divulgó ayer su Balance preliminar de las economías de América Latina y el Caribe, en el que estima que en 2017 la tasa de “crecimiento” económico de México será de 2.2 por ciento, inferior a la registrada en 2016. Y para 2018 sería de 2.4 por ciento, como resultado de una “mejoría” en el comercio mundial, el aumento de los ingresos públicos petroleros y las actividades de reconstrucción derivadas de los desastres naturales del presente año.
Para nuestro país, advierte el organismo, “existen riesgos ligados al cambio en las condiciones financieras internacionales por nuevos incrementos de las tasas de interés externas, por los efectos negativos que la reforma fiscal en Estados Unidos pudiera tener sobre el flujo de inversión a México y por el desenlace de las negociaciones del Tratado de Libre Comercio de América del 0.9 en 2017. Para las economías del grupo formado por Centroamérica, Cuba, Haití y República Dominicana se prevé una tasa de crecimiento de 3.6 por ciento, por encima de 3.3 de 2017. Para el Caribe de habla inglesa o neerlandesa se estima un crecimiento promedio de 1.5, a lo que contribuiría el gasto en reconstrucción para reparar el daño causado por los huracanes Irma y María en algunos países de la subregión.
En 2018 el desempeño latinoamericano y caribeño se desenvolverá en un contexto que seguirá siendo favorable tanto en el ámbito real como monetario. Para el próximo año se espera que la economía mundial se expanda a tasas cercanas a las de 2017 y se registre un mayor dinamismo en las economías emergentes respecto de las desarrolladas. No obstante, el contexto internacional no está exento de riesgos que plantean desafíos para la consolidación del crecimiento global en el mediano plazo.