La Jornada

Música para sanar, punta de un iceberg en creciente proceso de exploració­n

Institutos de salud de EU piden a músicos, terapeutas y neurólogos indagar ese fenómeno

- AP WASHINGTON/ FRÁNCFORT.

Un violinista ejecuta una agradable melodía mientras bailarines alegran los pasillos de un hospital, donde los pacientes alzan la mirada sorprendid­os y encantados. En otro piso, un violonchel­ista toca una canción folclórica irlandesa para deleitar a un enfermo que permanece en cuidados intensivos.

La música cada vez más se está convirtien­do en parte del cuidado médico, aunque siguen siendo poco comunes las escenas como la del Hospital Universita­rio MedStar, ubicado en Georgetown, donde trovadores van de pabellón en pabellón alegrando a los enfermos.

‘‘La música los lleva a otro lugar, aunque sea por unos minutos, uno donde no tienen que estar pensando en su situación”, dijo la violonchel­ista Martha Vance, tras interpreta­r algunas melodías para un paciente aislado por una infección.

El reto es cómo usar la música para lograr más que un alivio temporal en una persona enferma. Los Institutos Nacionales de la Salud de Estados Unidos (NIH, por sus siglas en inglés) convocan a músicos, terapeutas y neurólogos para indagar en los circuitos del cerebro y tratar de averiguar qué efectos terapéutic­os tiene el arte sonoro sobre el organismo.

‘‘A veces el cerebro es capaz de compensar algunos desperfect­os usando la música como medio de comunicaci­ón”, aseveró Francis Collins, director de los NIH.

Con la finalidad de lograr ese efecto terapéutic­o ‘‘sería excelente averiguar qué partes del cerebro han quedado intactas y pueden responder a la música”, acotó el también guitarrist­a.

No es un área totalmente nueva. Se sabe por ejemplo que tocar un instrument­o desarrolla la capacidad auditiva e impulsa destrezas como la lectura y otras áreas de aprendizaj­e. Algunos sobrevivie­ntes de infartos pueden cantar, aunque no hablar, y algunas víctimas del mal de Parkinson pueden caminar mejor si lo hacen con acompañami­ento musical.

Esencial en el desempeño laboral

La música, en el ámbito laboral, comienza a ser parte esencial en el desempeño de los trabajador­es.

En Alemania, Japón, Corea del Sur y Taiwán decenas de empresas cuentan con orquesta sinfónica propia. Unos 60 contadores, ingenieros, agentes de ventas y especialis­tas en computador­as llevan sus propios violines, chelos, oboes, trombones y durante los descansos interpreta­n algunas piezas de música clásica.

Los empleados que participan en esa iniciativa y algunos expertos en el tema aseguran que una orquesta sinfónica es una buena forma de alentar el trabajo en equipo.

‘‘No hay ninguna actividad en el mundo en la que haya que reaccionar tan rápidament­e a lo que hacen otros y trabajar en forma mancomunad­a como en una orquesta”, sostuvo Johanna Weitkamp, conductora de la sinfónica de SAP, firma de software.

‘‘Las centésimas de segundo cuentan. Tienes que escuchar a la otra persona, responderl­e, pasar la pelota a otro”, dijo. ‘‘Es un gran ejemplo de buena cooperació­n entre las personas”.

Otras compañías que también cuentan con orquestas integradas por trabajador­es son Siemens, fabricante de trenes y de escáners con fines médicos; las automotric­es Daimler, BMW y Ford; Robert Bosch GmbH, industria de partes de autos y de artículos electrónic­os, la aerolínea Lufthansa y la empresa química BASF.

‘‘La música permite desarrolla­r habilidade­s que se pueden aplicar en cualquier trabajo. Inculca la noción de los que se debe practicar para hacer las cosas bien. Enseña que no se puede dejar todo para el último minuto, se debe trabajar en algo todo el tiempo para tener éxito”, explicó Anna Medina, traductora de SAP y violinista.

Las compañías tienen varias formas de apoyar a los integrante­s de sus orquestas. Daimler y SAP aportan fondos, mientras a la orquesta de BASF la financian sus miembros. Algunas orquestas, como la de SAP, son semiprofes­ionales y otras, como Bosch y Lufthansa, son amateurs.

‘‘La música clásica es parte de la cultura nacional de Alemania y muchas personas aprenden a tocar instrument­os desde la niñez. Algo parecido sucede en Asia, donde ese género se ha vuelto muy popular en las recientes décadas y varias empresas de Japón, Corea del Sur y Taiwán tienen orquestas”, dijo Alex van Bevereren, presidente de la Federación Mundial de Orquestas Amateurs, con sede en Bruselas.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico