DEUDA EXTERNA ES IMPAGABLE; DEBE CANCELARSE, OPINA
El modelo neoliberal capitalista empuja a los pueblos a una crisis económica y política cada vez más profunda. Las deudas añejas y nuevas, propiciadas por los gobiernos inicuos, incapaces de proyectar o sostener una economía sana y sostenible, son el origen.
Los acreedores financieros internacionales –Banco Mundial y Fondo Monetario Internacional– recomendaron esclavizantes recetas de deuda externa, aconsejaron y, en algunos casos, presionaron a gobiernos como el nuestro a endeudarse hasta el cuello; algunos lo hicieron de manera inconsciente e irresponsable, hipotecando el presente y futuro de las mayorías que deberán pagar, sin saber por qué.
Las recetas de los acreedores financieros consistieron en achicar al Estado, el cual accedió fácilmente a conceder la desregulación y se sometió dócilmente a los dictados y condiciones del gran capital. La dependencia originó un círculo vicioso, pero la inmoralidad está en que ha pasado de deuda externa a eterna, al cubrirse sólo los intereses, y el monto va en ascenso.
Es tiempo que México exija renegociar o cancelar la deuda externa, por ser esta moralmente impagable. El tema debe ser tocado en las campañas electorales, pues es un problema serio, que condena al subdesarrollo a los pueblos y niega una vida digna a niños, jóvenes y adultos. Este asunto debe también ser abordado también por los países más endeudados del mundo, en las Naciones Unidas, a fin de discutir que los recursos que se destinan al pago, sirvan para paliar la pobreza y miseria que hay en varias partes del mundo.