El supremo dilema: ¿pirámides o redes?
jerarquía, coerción y violencia apuntalados por innumerables mecanismos, visibles u ocultos, sutiles o descarnados. Este modelo vertical, fincado en la coerción y en la violencia, está representado por la pirámide. En la punta de la pirámide habitan los seres divinos o humanos que explotan o dominan al resto. La pirámide moderna que se busca imponer por todos los rincones del orbe tiene, sin embargo, fisuras, islas, grietas, contracorrientes. A la fascinación por la pirámide hoy se opone otra figura geométrica, la red, que es, para decirlo pronto, una estructura horizontal, diversa, descentralizada, heterogénea y basada en la equidad.
Ejemplos piramidales notables son los estados, las iglesias, las corporaciones o empresas privadas, los ejércitos y los partidos políticos, que son las instituciones que mantienen la coerción y el orden. Y en la civilización moderna todo aquello que no se estructure en torno a la pirámide, a los sistemas de dominación y jerarquía, tenderá a ser denunciado, asediado, soslayado, reducido y eliminado.
Debemos a G. Deleuze y F. Guattari el haber desarrollado una teoría filosófica de las redes, basada en el modelo vegetal del rizoma. Los rizomas son brotes que se extienden subterráneamente y de manera horizontal, que pueden ramificarse en cualquier punto,