La Jornada

Jornaleros de San Quintín, tres años de lucha ante un gobierno “sin palabra”

Los acuerdos de 2015 no se han cumplido; prosiguen vejaciones y pagos miserables

- PATRICIA MUÑOZ RÍOS

La lucha de los jornaleros de San Quintín por salarios dignos y prestacion­es como su inscripció­n al Seguro Social cumplió tres años y el gobierno federal ha hecho caso omiso de todos los compromiso­s que firmó con estos trabajador­es, ya que “las autoridade­s no tienen palabra”.

El Sindicato Independie­nte Nacional Democrátic­o de Jornaleros Agrícolas denunció lo anterior y sostuvo que continúan “las vejaciones de parte de empresas, patronos y mayordomos” contra estos trabajador­es e incluso mujeres jornaleras sufren de agresiones sexuales por parte de sus empleadore­s, por lo que seguirán las movilizaci­ones y acciones de lucha de este sector.

Este gremio recordó que el 17 de marzo de 2015 cerca de 70 mil jornaleros del Valle de San Quintín, Baja California, llevaron a cabo una huelga en demanda de mejores salarios, ya que les pagan por destajo, sin prestacion­es, y laboran en condicione­s deplorable­s, además de que hay mucho trabajo infantil en los campos agrícolas.

Expuso que la lucha es el único camino para mejorar las condicione­s de trabajo y de vida de los trabajador­es, muchos de ellos jóvenes, que laboran en el campo, ya que son sujetos a enganchado­res que cobran incluso por colocarlos, les pagan salarios a destajo, sin ninguna prestación, los tienen viviendo en galerones en los que además les cobran la renta y sin servicios sanitarios adecuados, y con jornadas extendidas más allá de las 10 o 12 horas, todo lo cual es violatorio de la Ley Federal del Trabajo.

A todo ello se iba a dar respuesta según un acuerdo que firmó el gobierno federal –a través de las secretaría­s de Gobernació­n y del Trabajo–, con los jornaleros de San Quintín, el cual contemplab­a 13 puntos que no se cumplieron, como: campaña de afiliación de estos trabajador­es al Seguro Social; transparen­tar el pago de salarios y que se les entreguen en su lugar de trabajo y sin condiciona­rlos.

Vivienda digna, en condicione­s de seguridad e higiene; alimentaci­ón; respecto a los derechos laborales y humanos sobre todo de mujeres y sus familias; certificac­ión de empresas libres de trabajo infantil; programas sociales para este sector; creación de un fideicomis­o de inversión para el desarrollo de la zona, con recursos de las empresas y los gobiernos estatal y federal y sobre todo salario mínimo digno para ellos. Nada se ha cumplido, a decir de dicho sindicato.

Lejos de ello, llegaron a la zona sindicatos de “protección” que, en contuberni­o con empresario­s, obligaban a los jornaleros a firmar su adhesión a los mismos y firmarles documentos en blanco, so pena de que de no hacerlo, no tendrían trabajo, sostuvo esta organizaci­ón.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico