Javier Corral minimizó las amenazas de muerte contra Miroslava Breach
Cuando fue informado de la intimidación dijo que indagaría mediante un edil
En los testimonios recabados por las autoridades con relación al asesinato de Miroslava Breach Velducea, se señala que en agosto de 2016, cuando ella recibió una amenaza de muerte en la que le decían que dejara de escribir sobre narcopolítica en Chihuahua y que “se dedicara a otra cosa”, el actual gobernador, Javier Corral Jurado “le dijo que iba a ver el asunto a través del alcalde de Chínipas”, Hugo Amed Schultz Alcaraz, el munícipe quien a través de la dirigencia del Partido Acción Nacional (PAN) en esa entidad presionó a la periodista para que revelara sus fuentes y posteriormente entregó dos grabaciones a integrantes de Los Salazar, una célula del cártel de Sinaloa.
Los documentos refieren que durante cuatro años Miroslava Breach realizó una investigación y que “ya tenía documentado todo el enriquecimiento ilícito del gobernador César Duarte, y de la relación con el narco que tenían varios políticos, (y) que iba a ir sacando poco a poco (los) reportajes”.
El presidente municipal de Chínipas presionó a la comunicadora para revelar sus fuentes
“Robo” sospechoso
En ese entorno, una situación aparentemente inconexa se vivió en la casa de Miroslava Breach (la cual permanece prácticamente abandonada desde su asesinato): a finales de 2016 ocurrió un “robo”. Alguien forzó la cerradura de una de los portones de acceso. Toda la casa fue revisada, cada cajón, cada librero o estante, todo quedó revuelto. Pero nada de valor se llevaron los supuestos ladrones. Para las autoridades se trató de un intento de robo y no se abrió ninguna investigación.
Respecto de las diligencias para esclarecer el homicidio, los documentos que obran en poder del juzgado de control del distrito judicial Morelos, que encabeza el juez Napoleón Raya Valdez, resalta que la periodista “tenía información de la relación minera que tenían los narcos con los gobernantes y gente de gobierno”.
La periodista fue asesinada el 23 de marzo de 2017, horas después de ello el gobernador Corral ofreció una conferencia de prensa en la cual señaló que en el homicidio no se podía “descartar una procedencia del crimen organizado por el trabajo acumulado, persistente, consistente, documentable de Miroslava en la denuncia de bandas delincuenciales y de la corrupción política, particularmente en años recientes”.
Durante la investigación del caso, en las constancias se menciona que Miroslava Breach estaba “decepcionada” del actual mandatario chihuahuense, porque le había entregado información del gobierno anterior a Corral durante su campaña, le había proporcionado datos de su investigación y no los había usado”.
Desde diciembre de 2016 Miroslava Breach le comentó a varios de sus compañeros lo que ella consideraba que sería el gobierno de Javier Corral en 2017, llegó a decir que sería muy difícil en