Retiran 42 toneladas de basura para liberar sifón del río San Buenaventura
■ En San Bartolo el Chico y San Lorenzo la Cebada 25 familias resultaron afectadas ■ En la ESCA de Tepepan se obligó a tomar clases, pese a las áreas anegadas
Tras el desbordamiento del río San Buenaventura en Xochimilco, 25 familias fueron las más afectadas al inundarse sus hogares, así como varias áreas de la Escuela Superior de Comercio y Administración (ESCA), Unidad Tepepan, del Instituto Politécnico Nacional, pese a lo cual no hubo suspensión de clases.
Mientras, la Secretaría de Protección Civil informó que ayer cayó lluvia acompañada de granizo y fuertes vientos en las delegaciones Cuajimalpa, Magdalena Contreras y Gustavo A. Madero. La alerta amarilla fue declarada en Coyoacán, Milpa Alta y Xochimilco; no obstante, no hubo reportes de afectaciones de consideración.
El Sistema de Transporte Colectivo Metro informó que se implementó “marcha de seguridad” en las líneas 2, 3, 4, 5, 8, 9 y B.
Por la tromba que cayó la noche del miércoles se inundaron 10 casas ubicadas en las calles Rincón de los Nardos, Rincón de las Azucenas, Rincón de los Lirios, Rincón de las Dalias y Rincón de las Bugambilias, en la colonia San Bartolo el Chico. Tras el Un buzo revisa la captación Barrilaco, la cual está obstruida con basura en la colonia Lomas de Chapultepec, delegación Miguel Hidalgo meteoro, las familias empezaron a limpiar sus hogares, pero fue hasta la madrugada que lograron sacar el agua.
Personal de la Dirección
de Servicios Urbanos de Xochimilco logró desazolvar el sifón del río San Buenaventura cerca de las dos de la madrugada. Retiró seis camiones de basura con capacidad de siete toneladas para liberarlo.
En la colonia San Lorenzo la Cebada también se inundaron 15 casas. El agua rebasó 30 centímetros.
Ayer, personal de la delegación, en coordinación con el Sistema de Aguas de la Ciudad de México, continuó con el levantamiento del censo de damnificados, la limpieza y el reacondicionamiento de las calles y casas afectadas.
Pese a los daños en las instalaciones de la ESCA, las autoridades obligaron a estudiantes y maestros a realizar sus actividades académicas de manera normal, pese a que las aulas provisionales quedaron en mal estado, algunas de ellas todavía con charcos de agua, según denunciaron integrantes de la comunidad.
También se anegaron dos estacionamientos del plantel, la explanada y el gimnasio presentó serias filtraciones.
En noviembre pasado fueron colocadas 75 aulas provisionales en el plantel, a fin de que la comunidad retomara las actividades académicas tras el sismo de septiembre, el cual dañó parte de la infraestructura de la unidad académica, que permanece sin reparar.