PRECISIÓN DEL INIFED A NOTA SOBRE PRIMARIAS SIN INTERNET
Respecto de la nota con el encabezado: “Pese a millonario programa federal, 50 por ciento de primarias públicas no tiene Internet”, en el Instituto Nacional de la Infraestructura Física Educativa (Inifed) diferimos en el supuesto de que la inversión se haya centrado en nuevas edificaciones, pues desde hace tiempo el Inifed no realiza construcciones nuevas en educación básica. A la fecha coordina un programa de mantenimiento y rehabilitación denominado Escuelas al Cien, realizado exclusivamente para la mejora de los planteles educativos del país; éste representa la mayor inversión de las décadas recientes en infraestructura física educativa.
Al principio del sexenio el Cemabe reportaba menos de 29 por ciento de inmuebles con accesibilidad para personas con discapacidad, al día de hoy y con base a diagnósticos del Inifed, 43 por ciento de planteles educativos del país cuentan con accesibilidad. Además cada plantel educativo beneficiado con Escuelas al Cien tiene un comité de mejoramiento, integrado por padres de familia quienes conocen y participan en las mejoras de sus planteles. Queda así de manifiesto la interacción de las comunidades educativas con el programa.
De 2015 a 2018, el gobierno federal interviene más de 10 mil 105 escuelas indígenas (básica y medio superior) con inversión de 10 mil 960 millones de pesos, en beneficio de 1,344,233 alumnos. En relación a la conectividad, el programa referido contempla trabajos en la infraestructura en las preparaciones para cableado, tubería para fibra óptica, rehabilitación de aula de medios, entre otras, siendo otras dependencias del gobierno federal las responsables de dotar de Internet a las escuelas. La impronta que nos marcan a los médicos de por vida al ingresar a la Escuela de Medicina es: primum non nocere (primero no hacer daño), alocución latina atribuida a Hipócrates, y esa obligación de nunca hacer daño consagra uno de los principios de la ética médica.
Lo anterior viene a colación, pues el gremio de nuevo salió a las calles a pedir justicia. Esta vez por la detención de nuestro colega oaxaqueño Luis Alberto Pérez Méndez, vinculado a proceso por homicidio con dolo eventual con agravante de responsabilidad médica, por supuesta negligencia que tristemente provocó la muerte de un niño. Acusar a un profesional de la salud de homicidio intencional puede sentar un precedente legal perverso y peligroso contra el gremio, más ahora que el homicidio doloso es uno de los eventos más ominosos que enfrenta nuestro país.
Que la autoridad los haya clasificado de doloso, sin duda criminaliza y estigmatiza la actividad médica, además es ridículo usar de agravante que el hospital no tenía unidad de cuidados intensivos. En 90 por ciento de los hospitales del país no se tienen. Con esto se somete al personal de salud a trabajar amenazados y en silencio, en un sistema de salud rebasado.
En nuestra profesión, sin duda, como en cualquier otra, aun cumpliendo todos los parámetros del método científico no estamos libres de cometer errores involuntarios; no somos infalibles, pero estoy seguro de que nunca causaremos daño intencional.
Debe quedar claro: los médicos no nos oponemos a la penalización de existir alguna responsabilidad, no queremos impunidad, sí a las leyes, pero sin criminalizar nuestra profesión. El acto médico está sujeto a muchas circunstancias y aristas que pueden generar una falla o error, por eso no se debe judicializar todo lo que conlleva el ejercicio de nuestra profesión.
Solicitamos que en caso de sospecha de mala práctica, los hechos sean dictaminados por comités especializados, y sólo después de hallarse elementos que configuren un acto criminal, remitir a las instancias judiciales, pero evitar criminalizar el acto médico en primera instancia. ...Uno, material, por construirse en territorio estadunidense; otro, humano, ya en funciones en México.