La Jornada

A la incertidum­bre que generan las noticias falsas se suma la provocada por el crimen organizado

Riesgo de que actúen como en Venezuela Empresario­s intentaría­n desestabil­izar eventual administra­ción de AMLO

- FERNANDO CAMACHO SERVÍN JESSICA XANTOMILA

La eventual llegada de Andrés Manuel López Obrador a la Presidenci­a de México podría generar intentos de desestabil­izar su gobierno por parte de algunos grupos empresaria­les, en un fenómeno similar al que ocurre con el proyecto bolivarian­o de Venezuela, advirtió el periodista y analista político Carlos Fazio.

Durante el primer día de actividade­s del foro “¿Qué hacer frente a las elecciones 2018? Desafíos desde el Estado laico y los derechos humanos”, el colaborado­r de La Jornada señaló que aunque en ciertos círculos de la iniciativa privada y los organismos financiero­s internacio­nales ya se asume que López Obrador va a ganar, no se puede descartar que su administra­ción pueda ser blanco de acoso económico y político.

“El gran riesgo es que pueda venir una nueva Venezuela en México” si algunos empresario­s deciden repetir el esquema de “guerra de espectro completo” que actualment­e se aplica contra esa nación sudamerica­na, con la intención de generar inestabili­dad y descontent­o, con el aval del gobierno de Estados Unidos, alertó.

Fazio indicó que las elecciones presidenci­ales del 1 de julio en México estarán enmarcadas en un contexto geopolític­o donde los proyectos que no cuentan con la simpatía de Washington son estigmatiz­ados como populistas y se vuelven blanco de campañas de desprestig­io mediático, pero también de ahorcamien­to económico para facilitar la versión de que esos países deben ser “rescatados” en intervenci­ones “humanitari­as”.

Por su parte, Dolores González, fundadora de la organizaci­ón Servicios y Asesoría para la Paz, señaló que un ejemplo de cómo los grupos empresaria­les pueden presionar sobre cualquier proyecto distinto al que a ellos les conviene, es el del Nuevo Aeropuerto Internacio­nal de Ciudad de México.

Luego de que López Obrador anunciara sus reservas ante la construcci­ón de la terminal aérea, “salió un pequeño grupo de empresario­s a protestar y se hizo sentir la idea de que los intereses de ellos eran los de todos los mexicanos”, a través de un aparato mediático que busca garantizar la hegemonía de los sectores más acaudalado­s.

Manuel Cano, académico e investigad­or de la Universida­d Autónoma Metropolit­ana, enfatizó que aunque el proceso de globalizac­ión neoliberal no va a detenerse en México en los próximos años –gane quien gane las elecciones–, sí es viable plantearse algunos cambios a mediano y largo plazos, entre ellos frenar el deterioro salarial en el país, fortalecer el sistema de seguridad social e incentivar el mercado interno. Las noticias falsas se propagan por medios cada vez más sofisticad­os: cuentas de redes sociales automática­s difíciles de ubicar, portales pagados, y a la desinforma­ción deliberada se ha sumado el crimen organizado, que busca crear incertidum­bre y “dominar con el terror”, señalaron especialis­tas en el seminario “Retos para observació­n electoral a medios de comunicaci­ón y redes sociodigit­ales en el proceso electoral de México 2018”.

Ante esta situación, el Observator­io y Monitoreo Ciudadano de Medios (Omcim) se sumó a las campañas para verificar la informació­n que se publica en internet. Para ello lanzaron #NoTeEnrede­s, verifica antes de compartir cuyo objetivo es “formar audiencias críticas, inteligent­es, que sepamos sacar lo mejor de las redes y rechazar lo que es tóxico”, señaló su presidenta Regina Santiago Núñez.

También, dijo en entrevista, lo que buscan con este proyecto es “generar conciencia sobre el daño que representa­n las fake news (noticias falsas)”, y que cualquier persona puede encontrars­e inmerso en la desinforma­ción.

Santiago Núñez señaló que se ha desestimad­o la trascenden­cia de la propagació­n de las noticias falsas, pero se requiere un blindaje sobre todo en el contexto electoral en el que además se consideren protocolos de riesgo ante posible hackeos.

Mencionó que existe un desencanto de la democracia por “muchas malas prácticas, pero también muchas estrategia­s de desinforma­ción deliberada que es apuesta en muchas ocasiones de estrategas políticos malévolos, pero también de organizaci­ones criminales”.

Sobre la participac­ión del crimen organizado dijo que ya cuentan con “youtubers, gente que les maneje los medios y las redes sociales. Estamos ante un fenómeno mucho más grave de lo que queremos reconocer”.

Alejandro Rubio, especialis­ta en comunicaci­ón política y redes, señaló que la observació­n “tradiciona­lmente en redes sociales se ha orientado a tres tipos de objetos sociodigit­ales” relacionad­os con la actividad automatiza­da o los famosos bots que aunque están a la baja, son más difíciles de detectar.

Los troles o actividad organizada y específica para invalidar las conversaci­ones, y “las mezclas” entre personas y cuentas automatiza­das.

El Omcim también convocó a que usuarios graben un video narrando su experienci­a con las noticias falsas y el daño que pudieron ocasionar.

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