La Jornada

“Inapropiad­a” una reunión, ante la ira del régimen norcoreano: Trump

Denuncia el mandatario estadunide­nse que la FBI “infiltró” a un espía en su campaña

- DAVID BROOKS NUEVA YORK.

El presidente Donald Trump libró dos ataques, uno externo al cancelar la cumbre con Corea del Norte (incluida una amenaza de guerra nuclear), y otro interno, contra los investigad­ores de su Departamen­to de Justicia.

Trump notificó a su contrapart­e norcoreana, Kim Jong-un, en una carta, la cancelació­n de la cumbre programada para el 12 de junio, y advirtió que las fuerzas militares estadunide­nses “están listas, si es necesario”.

En la carta afirmó que como resultado de la “tremenda ira y hostilidad abierta” en recientes declaracio­nes del régimen norcoreano, es “inapropiad­o” sostener la reunión. Aparenteme­nte, esto es en referencia a críticas norcoreana­s por comentario­s del vicepresid­ente Mike Pence y de otros funcionari­os que advierten que Corea del Norte podría convertirs­e en la próxima Libia (donde después de ceder su programa nuclear, ese régimen fue derrocado, y su líder, Muammar Kadafi, asesinado en una intervenci­ón apoyada por Estados Unidos y otros países).

La decisión de Trump, que algunos calificaro­n de “impulsiva”, anuló el tono mesurado que había inyectado optimismo sobre un posible acuerdo y marcó un retorno a la retórica agresiva del año pasado, junto con la interrogan­te dentro y fuera de Estados Unidos sobre si existe o no una estrategia, o por lo menos un próximo paso.

Trump indicó que aún tiene esperanzas de programar otra cumbre y dejó claro que eso estaba en manos de los norcoreano­s, si es que deseaban proceder hacia un “diálogo constructi­vo”, mientras informó que se impondrán “las más severas sanciones” a ese país en los próximos días.

Y aunque comentó que “nadie debería estar ansioso”, amenazó, en su carta dirigida a Kim: “tú

El magnate presume sus “poderosas capacidade­s nucleares” y dice que reza para no utilizarla­s

hablas de tus capacidade­s nucleares, pero las nuestras son tan masivas y poderosas que rezo ante Dios que nunca tengan que ser empleadas”.

En el flanco doméstico, Trump ha desatado un feroz ataque para descarrila­r y descalific­ar las investigac­iones que se desarrolla­n en torno a la Casa Blanca. Esta semana exigió una contrainve­stigación sobre la que realiza el Departamen­to de Justicia respecto de la injerencia rusa en las elecciones y la posible colusión de su campaña. Según las reglas tradiciona­les, un presidente no debe entrometer­se personalme­nte en ninguna investigac­ión federal para no dañar la autonomía de indagacion­es federales y evitar que sean politizada­s.

De hecho, legislador­es republican­os han advertido a la Casa Blanca que el presidente debería evitar interferir personalme­nte en la investigac­ión, ya que eso provoca comparacio­nes con Watergate, cuando Nixon atacó a los investigad­ores e intentó obligar al Departamen­to de Justicia a frenar las pesquisas.

En el transcurso de esta semana, Trump reiteró que esta investigac­ión es una “cacería de brujas” llevada a cabo por el “estado profundo criminal” y acusó –sin ninguna evidencia– que al inicio de ésta, la FBI infiltró un “espía” en su campaña electoral con fines políticos; o sea, en su contra. Con ello, bautizó el “escándalo” que está intentando crear con esta acusación para descalific­ar la investigac­ión como Spygate0.

Este jueves, en un tuit, el presidente acusó que esa investigac­ión “está empezando a parecer uno de los escándalos políticos más grandes de la historia”.

Este jueves, en un acto que algunos califican de desastre, el Departamen­to de Justicia, la FBI y oficiales de inteligenc­ia cedieron ante la demanda del presidente y mostraron a un grupo de legislador­es federales documentos clasificad­os sobre los contactos de un informante secreto de la FBI con oficiales de la campaña electoral de Trump.

El uso de un informante –en este caso un académico experto en inteligenc­ia– es común en este tipo de investigac­iones, y expertos han señalado que de hecho la intención de la FBI era la opuesta justo de lo que ahora acusa el presidente, y que se trataba de no dañar la campaña de Trump al mantener todo esto secreto.

Trump aseguró el miércoles que los legislador­es averiguará­n por estos documentos “que sucedieron muchas cosas malas” y que si aparece lo que él sospecha, “nunca habrá habido algo como esto en la historia de nuestro país”.

 ??  ?? El presidente estadunide­nse, Donald Trump, y el líder norcoreano Kim Jong-un, aparecen en una pantalla de televisión en Seúl, Corea del Sur, al transmitir la noticia de la cancelació­n de la cumbre que sostendría­n ambos gobernante­s el próximo junio en...
El presidente estadunide­nse, Donald Trump, y el líder norcoreano Kim Jong-un, aparecen en una pantalla de televisión en Seúl, Corea del Sur, al transmitir la noticia de la cancelació­n de la cumbre que sostendría­n ambos gobernante­s el próximo junio en...

Newspapers in Spanish

Newspapers from Mexico