Dos becarios preparan a olimpistas de física
Aspirantes con discapacidad reciben atención personalizada Participan 70 mil jóvenes en examen de ingreso a 122 licenciaturas de la UNAM
El combate a la pobreza, la desigualdad y la exclusión en América Latina (AL) exige tener universidades fuertes y comprometidas con la sociedad, afirmó Marcelo Knobel, rector de la Universidad Estadual de Campinas, Brasil, quien subrayó que las instituciones de educación superior no sólo deben garantizar que más jóvenes vayan a las aulas universitarias, sino que “logren permanecer en ellas para acceder a una formación humanista y ética. No es una tarea fácil, pero tenemos que ser optimistas”.
Tras participar en el IV Encuentro Internacional de Rectores 2018, organizado por Universia los pasados 21 y 22 de mayo en Salamanca, España, Knobel indicó que para hacer de las universidades motores de cambio en los territorios donde se ubican, tienen que generar alianzas con todos los sectores, incluyendo a los empresarios, pero también a las organizaciones no gubernamentales, con los políticos y con la región, a fin de establecer una agenda común de desafíos que necesitan atenderse.
Las universidades “no pueden pensar que son las dueñas de la verdad y traer ya las soluciones, necesitamos trabajar más en conjunto con el entorno y los actores que nos rodean para dar respuesta a problemas muy complejos, pero también tenemos que demostrar a la sociedad por qué somos importantes”, agregó.
Destacó que esa será una de las reflexiones que se abordarán en la III Conferencia Regional de Educación Superior en América Latina y el Caribe (CRES2018), que se celebrará del 11 al 15 de junio en Córdoba, Argentina, donde “analizaremos cuál es la misión de la universidad, a quién servimos, para qué y cómo podemos mejorar”.
En América Latina y el Caribe, consideró, “tenemos grandes problemas, como la desigualdad y la pobreza. Sabemos que en nuestros países acudir a la universidad sigue representando dar un gran salto social, pero hay muchos que aún no tienen esa oportunidad, por eso tenemos que ampliar el acceso y la permanencia, para que hagamos de la educación un motor de desarrollo social y económico”.
En entrevista por separado, el rector de la Universidad de Salamanca, Ricardo Rivero, reconoció que la universidad “siempre debe contribuir a la equidad social y a la reducción de las diferencias entre las personas”, y enfatizó que las universidades latinoamericanas “están haciendo un buen trabajo en ese sentido”, entre ellas la Universidad Nacional Autónoma La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) inició ayer la aplicación de su segundo examen anual de admisión a alguna de sus 122 licenciaturas.
Alrededor de 70 mil jóvenes se presentan a la prueba, cuyos resultados podrán consultar por internet a partir del próximo 16 de julio en el portal de la Dirección General de Administración Escolar (DGAE).
Cada año la institución tiene capacidad para aceptar entre 8 y 10 por ciento de los aspirantes que participan en sus dos concursos de admisión.
La aplicación del examen se realiza en distintas sedes y concluirá el siguiente fin de semana; de México, que “se esfuerza por mantener un compromiso social”.
En cuanto a los recursos que se deben destinar desde los gobiernos a la educación superior, afirmó que uno de los desafíos consiste en un cuestionario de 120 preguntas que son calificadas con equipos automatizados.
Los resultados del primer concurso de ingreso de este año mostraron que de más de 140 mil aspirantes, sólo se admitió a alrededor de 10 por ciento.
El miércoles 6 de junio se aplicará el examen de admisión a aspirantes con alguna discapacidad. En esa ocasión los aspirantes serán atendidos de manera personalizada. De acuerdo con información institucional, la Universidad cuenta con la infraestructura y el personal adecuados para atender a los aspirantes, que pueden presentarse con un acompañante.
El examen se realiza en planta baja y en instalaciones que permiten la movilidad con silla de que “día a día tenemos los rectores es demandar al Estado que se destinen mayores fondos al sector y a la formación de las nuevas generaciones, tarea que es absolutamente clave”. ruedas, con bastón o muletas; se les brinda apoyo en la lectura del examen, en el relleno de alveolos; puede ingresar un lector junto con el aspirante.
La atención personalizada a aspirantes de licenciatura con discapacidad se realiza desde junio de 2015 en una sola sede: el Centro de Exposiciones y Congresos de la UNAM.
Hay dos formas de ingresar a las licenciaturas de la universidad: el pase reglamentado para los egresados de los 14 planteles de los dos subsistemas de bachillerato (nueve de la Escuela Nacional Preparatoria y cinco del Colegio de Ciencias y Humanidades), y el examen de selección, para egresados de bachilleratos que no pertenecen a la UNAM. Dos jóvenes estudiantes oaxaqueños son los entrenadores de la Facultad Ciencias (FC) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) que preparan a alumnos de bachillerato para concursar en las olimpiadas de física.
Antonio García Torres y David Silva Roy, ambos de 20 años, llegaron a Ciudad de México hace dos años. El primero, para estudiar en la Facultad de Derecho; el segundo, en la de Ciencias. Son becarios del Programa Universitario de Estudios de la Diversidad Cultural y la Interculturalidad (Puic) de la UNAM y preparan a jóvenes de bachillerato en el taller Rumbo a las olimpiadas de la física, que imparten los sábados en la FC.
Su interés por ayudar a otros estudiantes jóvenes de Oaxaca en el aprendizaje de la física los llevó a participar con académicos de la Universidad Autónoma Metropolitana, unidad Iztapalapa, en la preparación de alumnos de esa institución para la Olimpiada Metropolitana de Física.
A invitación de Víctor Romero Rochín, investigador del Instituto de Física de la UNAM, comenzaron a trabajar en el taller que se imparte en la FC.
Romero Rochín, coordinador de la Olimpiada Mexicana de Física e integrante de la Sociedad Mexicana de Física, afirma que desde la creación del taller, en 2015, “no había pegado hasta que llegaron ellos, ahora el taller es suyo y ya ha tenido frutos”.
En 2017 el trabajo de estos jóvenes logró por primera vez que seis de ocho participantes de la olimpiada metropolitana obtuvieran reconocimiento.
En la actualidad entrenan a los jóvenes que representarán a México en la Olimpiada Internacional de Física que se celebrará en julio en Portugal, y en la Olimpiada Iberoamericana de Física a realizarse en Puerto Rico en noviembre.
El taller Rumbo a las olimpiadas de la física se imparte los sábados con el apoyo del Departamento de Física de la Facultad de Ciencias, es gratuito y no se necesita inscripción. Está abierto a estudiantes de bachillerato o preuniversitarios que quieran participar en algún concurso o que les interese la física “por el simple placer de aprender”, de acuerdo con carteles alusivos al taller.
Universdiades deben demostrar a la sociedad por qué son importantes