Evitar contaminación de miel con transgénicos, exigen importadores
Peligran las ventas del producto, advierten en carta a Peña
No obstante, dicha consulta no ha podido realizarse debido a que –según los apicultores y las organizaciones civiles que los acompañan– diversos organismos gubernamentales la han obstaculizado y han recurrido a amenazas e intentos de división entre las comunidades. Mientras tanto, sigue habiendo denuncias en el sentido de que Monsanto no ha frenado la siembra de soya transgénica, lo cual afecta la producción de miel.
“Casi la mitad de las exportaciones mexicanas de miel llegan a Alemania, pero los consumidores alemanes están rotundamente en contra de la presencia de organismos genéticamente modificados, y aún menos en la miel”, señala la carta enviada a Peña Nieto.
Nayeli Ramírez, asesora legal de las comunidades mayas opositoras a la soya transgénica, subrayó que si los importadores europeos dejan de comprar compran la miel que producen los apicultores de la península de Yucatán, se producirán afectaciones directas para alrededor de 16 mil familias de productores, pero los efectos también serán para los negocios que dependen de los recursos que genera la venta de miel.
De acuerdo con cálculos de los apicultores afectados, el factor de la soya transgénica ha hecho bajar los niveles de producción de miel de manera preocupante. Un ejemplo de ello es que en 2015 las exportaciones fueron de 41 mil 500 toneladas –de las cuales entre 45 y 50 por ciento se generan en la península de Yucatán–, pero en 2016 la producción cayó a 29 mil 200 toneladas, y en 2017, a 27 mil 500.
Implicaría pérdidas millonarias para familias apicultoras de Yucatán